Es increíble la diferencia que observo hoy en día (para fortuna de nosotras las féminas): muchos hombres atienden a sus hijos con el mismo amor que sus madres (bueno, le llegan cerca), podemos ver padres llevando a sus bebés en las compras, cambiando pañales, alimentándolos, durmiéndolos y jugando felizmente con ellos.
En mi caso, mi esposo comparte conmigo ampliamente todo en relación a nuestro hogar y a nuestros hijos, hasta peinar a mi hija de ser necesario (y dejarse peinar por ella, jajaja).
Creo que esto es muestra de evolución en el hombre: la sensibilidad de acercarse a sus hijos desde el amor, la comprensión de la responsabilidad que incluye ser padre, la justicia de compartir ese rol con su pareja... ser más humano.
Pienso que actualmente los matrimonios somos más un equipo remando en la misma dirección, con las mismas fortalezas, debilidades y responsabilidades.
Saludos maestro @bert0.