When it comes to remembering someone, when it comes to getting a tattoo usually everyone thinks of the face, however, in my case I would like to immortalize the memory of two very important people to me, but using another part of their body.
When I was pregnant, it seemed magical to me every time that through an ultrasound I could see my children inside my belly, and after they were born, I loved to be able to caress their little feet while I was breastfeeding them. For me, although that time was quite complicated because of the lost sleep, it remained as a beautiful and unrepeatable experience.
At some point, I had a co-worker who had tattooed the fingerprint mark of her son's little feet, the same that is done in the hospital discharge document, just near the heel of one of her legs, and although at that time I was not attracted to tattoos, I thought it was a nice reminder of that moment when life changes you completely.
Now that I think about it with a different mindset, being able to carry that memory on my skin would be a way not only to honor her existence in my life, but also to be able to remember those unique moments of her early childhood.
But if I had to choose the design of any portrait, I would most likely only tattoo the eyes of each of them, with that innocent child's gaze, which fades with the years, to leave it permanently on me, as when they saw me as the center of their existence.
It would be a minimalist tattoo, in a place where I could see them, to take refuge in them during the moments of urgency, remembering that they were my strength during the years I had to raise them, overcoming every financial, physical and mental obstacle, in order to preserve their integrity and make their childhood a carefree stage.
My older son when he was a 2 years old.
They have been my favorite people, for the simple fact of bringing out the good in me and for giving me the fortune of seeing them grow and form them, how could I not want to immortalize that stage of their lives when they became the center of everything?
Cuando recordar a alguien se trata, al momento de hacerse un tatuaje por lo general todos piensan en el rostro, sin embargo, en mi caso me gustaría inmortalizar el recuerdo de dos personas muy importantes para mí, pero usando otra parte de su cuerpo.
Estando embarazada, me parecía mágico cada vez que a través de una ecografía podía ver a mis hijos dentro de mi vientre, y luego de nacidos, me encantaba poder acariciar sus piecitos mientras los amamantaba. Para mí, esa época aunque fue bastante complicada por el sueño perdido, quedó como una hermosa e irrepetible experiencia.
En algún momento, tuve una compañera de trabajo que se había tatuado la marca de las huellas digitales de los piecitos de su hijo, la misma que se hace en el documento de salida del hospital, justo en la parte cercana al talón de una de sus piernas, y aunque en ese momento no me llamaba la atención los tatuajes, me parecía que era un lindo recuerdo de ese instante cuando la vida te cambia por completo.
Ahora que lo pienso con otra mentalidad, poder llevar ese recuerdo en mi piel sería una manera no solo de honrar su existencia en mi vida, sino también poder recordar esos momentos tan únicos de su primera infancia.
Pero si tendría que elegir el diseño de algún retrato, lo más probable es que solo tatuaría los ojos de cada uno de ellos, con esa mirada de niño inocente, que se va borrando con los años, para dejarla permanentemente en mi, como cuando me veían como el centro de su existencia.
Sería un tatuaje minimalista, en un lugar donde pudiera verlos, para refugiarme en ellos durante los momentos de apremio, recordando que fueron mi fuerza durante los años que los tuve que criar, superando cada obstáculo financiero, físico y mental, con tal de preservar su integridad y hacer de su infancia una etapa libre de preocupaciones.
Mi hijo mayor cuando tenía 2 años.
Ellos han sido mis personas favoritas, por el simple hecho de sacar lo bueno de mi y por darme la fortuna de verlos crecer y formarlos, ¿cómo no querer inmortalizar esa etapa de sus vidas cuando pasaron a ser el centro de todo?
Foto/Photo by: Cottonbro Studio (pexels), Pic_Pantther (pixabay) and @mamaemigrante
Edición/Edited by @mamaemigrante
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Creo que sería un hermoso tatuaje. También preferiría un tatuaje que represente a esa persona en vez de un nombre o rostro.
Si! además que es algo más personal, que solo entenderías tu y eso lo hace más intimo.
Hola @mamaemigrante, el tatuaje de los piecitos siempre me ha parecido muy tierno y como dices, es una bonita forma de representar ese gran cambio en tu vida. Tu idea de tatuaje me parece muy acertada, puesto que para las madres siempre seremos sus bebés.
Exactamente, eso es algo que lo entiendes cuando eres mamá. Mi abuela le decía a sus hijas de más de 60 años, mis muchachas, y pues muchas veces recuerdo cuando mis hijos eran bebés, que mejor manera de inmortalizarlo que con un tatuaje.
Hay mucha ternura en este post, esos ojitos serían un lindo tatuaje.
También soy de las que me gustan más las partes del cuerpo en vez del rostro.
A mi me sería difícil encontrar una foto que me guste como para hacer el rostro completo, además que me daría miedo que en lugar de salir una sonrisa, pareciera una cosa deforme y que en lugar de un lindo recuerdo, fuera una pesadilla ver el tatuaje.