ES
Llegó la Navidad de nuevo, y con ella muchas reflexiones de fin de año, y entre ellas la que nos plantea nuestra amiga @damarysvibra con ¿Quién soy? Mi yo navideño. Y para llegar a quién es mi yo navideño en la actualidad, debo empezar por el principio. Cuando era chica, la Navidad era la época más esperada por mí, porque era el momento en que toda la familia se reunía; en mis primeros años vivía con mi abuela, mis padres vivían en la ciudad entonces por esas fechas más que todo, era que llegaba mi madre llena de regalos y con ella toda la familia, mis tías, mis primos, mi padre no viajaba con mi madre así que no tengo casi recuerdos con el de esos días, pero eso nunca me oscureció el panorama, había mucho porque sonreír.
Así es que por aquellos días, todo era un torbellino, la preparación de las hallacas, la música, los dulces, los juegos y sobre todo los regalos, pero lo que más disfrutaba era la compañía de mi familia materna. La Navidad era sinónimo de felicidad genuina, en aquel tiempo. Pero poco a poco los años fueron pasando, mi abuela murió, la familia cada uno fue tomando nuevas costumbres navideñas cada cual en sus casas y muchas cosas cambiaron, entonces ya la Navidad no era tan especial para mí; más, sin embargo, desde el mismo momento en que me case y tuve a mi hija, trate de que eso cambiara, porque ya tenía a alguien a quien cuidarle los sueños y las ilusiones, empecé a montar mi nacimiento a hacer mi comida navideña, aunque casi siempre la encargaba, pues trabajaba hasta bien entrado diciembre.
Pero el caso era que quería que mi hija tuviera eso que yo tuve de niña y hasta adolescente y eso me hacía feliz. Luego vinieron otros cambios en mi vida, un divorcio, nuevas rutinas y fue bastante difícil para nosotras. Allí las primeras Navidades, después de todo eso, fueron agridulces, pero agradecíamos el poder estar juntas, sanas y en paz. Luego de que me case de nuevo y tuve a mis otros hijos, empezamos entre todos a tratar de recrear ese ambiente navideño un poco descuidado. Ya no encargaba mis hallacas, ya nos dedicamos a elaborarlas y entre todos nos abocamos a eso. Ya es una tradición instaurada en casa, compartimos y disfrutamos estos días de preparaciones navideñas.
Hoy día, mi yo navideño, está más sosegado, ya los chicos están más grandes, hacemos nuestras preparaciones navideñas, pero ya no como cuando estaban pequeños, pues ya saben quién es el Niño Jesús, ja, ja, ja, han tenido que vivir otras realidades también. Ahora, con que tengan la comida navideña que les gusta, su decoración sencilla y podamos estar todos juntos y bien, ellos son felices con eso y si, por supuesto, podemos ir a la playa o a otro lugar diferente de la casa mejor. Por mi parte, mi yo navideño actual tiene un toque agridulce por tantas ausencias en la mesa, que se han ido sumando, pero siempre agradecida de poder compartir la Navidad con mi familia cercana y algunos que otros amigos, pues no soy de aglomeraciones y fiestas, me gusta mas celebrar en intimidad, pero siguiendo cuidando los sueños e ilusiones de los mas pequeños.
EN
Christmas is here again, and with it many end-of-the-year reflections, and among them the one posed by our friend @damarysvibra with Who am I? My Christmas self. And to get to who my Christmas self is today, I have to start at the beginning. When I was a girl, Christmas was the most awaited time for me, because it was the time when the whole family got together; in my early years I lived with my grandmother, my parents lived in the city so for those dates more than anything else, was that my mother arrived full of gifts and with her the whole family, my aunts, my cousins, my father did not travel with my mother so I have almost no memories with him of those days, but that never darkened my outlook, there was a lot to smile about.
So in those days, everything was a whirlwind, the preparation of the hallacas, the music, the sweets, the games and above all the gifts, but what I enjoyed most was the company of my maternal family. Christmas was synonymous with genuine happiness, at that time. But little by little the years went by, my grandmother died, the family began to adopt new Christmas customs each one in their homes and many things changed, then Christmas was not so special for me; however, from the moment I got married and had my daughter, I tried to change that, because I had someone to take care of my dreams and illusions, I began to assemble my nativity scene and make my Christmas food, although I almost always ordered it, because I worked until well into December.
But the fact was that I wanted my daughter to have what I had as a child and even as a teenager and that made me happy. Then came other changes in my life, a divorce, new routines and it was quite difficult for us. There first Christmas, after all that, was bittersweet, but we were grateful to be together, healthy and at peace. After I got married again and had my other children, we all started to try to recreate that Christmas atmosphere a little bit neglected. I no longer ordered my hallacas, we dedicated ourselves to making them and we all dedicated ourselves to that. It is already a tradition at home, we share and enjoy these days of Christmas preparations.
Nowadays, my Christmas self is calmer, the kids are older, we make our Christmas preparations, but not like when they were little, because they already know who the Baby Jesus is, ha, ha, ha, ha, they have had to live other realities as well. Now, as long as they have the Christmas food they like, their simple decorations and we can all be together and well, they are happy with that and if, of course, we can go to the beach or to another place different from the house, even better. For my part, my current Christmas self has a bittersweet touch because of so many absences at the table, but I am always grateful to be able to share Christmas with my close family and some other friends, because I am not one for crowds and parties, I like to celebrate in intimacy, but still taking care of the dreams and illusions of the little ones.
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Banners @brujita18
Las fotografías pertenecen a mi álbum personal/ The pictures belong to my personal album
Thanks You 💞
Asì es amiga @brujita18, muchos cambios. mesas casi vacìas.
Asì vamos, lo importante es tener tranquilidad y vivir lo que se presenta y como se presenta para estar bien.
Abrazos
Hola amiga @mercmarg, gusto tenerte por aqui, siempre es agradable. Un abrazo!
Saludos
Feliz Navidad
Hola @brujita18, Como dices hay que cuidar los sueños e ilusiones de los más pequeños. Que tengan unas bellas navidades. 😊
Igualmente para ustedes, muchas bendiciones🙏
La Navidad es sinónimo de felicidad genuina. Me gusta esta frase. La Navidad unía a tu familia materna y a ti te gustaba mucho desde pequeña, que era época de preparar hallacas, dulces y recibir regalos. Esto marca la vida de cualquier persona desde la infancia y a la Navidad se le da un significado muy personal, centrado en el amor y la paz.
Feliz tarde.
Así es, antes que todo la familia era el centro de mi felicidad realmente. Gracias por comentar, saludos!
Adelante amiga y tengas unas navidades felices.
Igualmente 🙏
Me ha encantado leerte, como siempre, es un placer conocerte por historias como estas y sentir que estamos más cerca de lo que pensamos. Me encantó esto de, en mi yo navideño faltan muchos puestos en la mesa porque en mi caso es así y duele, pero, reconforta saber que le sigues sabiendo en ese espacio que no está a la vista en la mesa, pero sí en el corazón y en tu alma.
Deja ver si me animo a escribir porque me duele no tener a mi madre que en esta época del año era la navidad personificada. Feliz navidad. Salud y saludos.
Hola mi querido @tonyes. Entiendo perfectamente si está vez no me quieres acompañar en esta invitación. Al contrario, discúlpame tú. Debí suponer que tú ánimo navideño este año está bajo no es para menos. Igual el cariño es el mismo🫶 y me encanta que me hayas visitado un 🤗 😘