En el final de los 70’ y los 80’ en Cuba escasearon todo tipo de artículos.
Después del derrumbe del Campo Socialista incluso fue peor encontrar artículos básicos.
La capacidad adaptativa fue puesta a prueba en toda su dimensión. Y rescatar viejas artes olvidadas ya, fue necesario.
Mi mama aprendió a tejer con dos agujas desde pequeña y en esta etapa practicó bastante.
Ya pasados los 2000’ y con nieto ya, estando de visita en Alemania se dió cuenta que era mas fácil y hermoso “hacer” que “comprar”.
Desde entonces mi sobrino(su nieto) y los bebes de toda la familia disfrutan del arte que sale de las manos de mi madre. Esta es su ultima obra.
Ya esta trabajando en otras.....