¡Sin Temor al Comienzo de una Nueva Etapa de la Vida!
Hola amigos de Steemit un gran saludos para todos.
Primeramente, hoy iniciando Octubre, deseo un mes lleno de muchas bendiciones, éxitos, salud y felicidad para todos.
Tal como ha sido mi costumbre, quiero compartir con todos ustedes una vez más mis positivos pensamientos, palabras y acciones; hoy enfocada en un nuevo comienzo, de mes, de semana y sobre todo de la vida misma.
Es decir, como todos sabemos, la vida esta llena de múltiples variantes, facetas, fases o etapas; las cuales a veces son tristes e infelices, otras tienden a ser intensas y exigentes; también las hay muy tranquilas y felices, las “cansonas” con exceso de trabajo o de actividades, las complicadas, las complejas; y por supuesto, nunca faltarán las aburridas, monótonas y hasta absurdas.
Pero, la variable común es que casi todas ellas necesitan solo de un poco de fe, motivación y sueños para llevarlas o seguir adelante y lograr lo que anhelamos; mientras que otras, únicamente necesitan un poco de fuerza de voluntad para mantenerlas, mejorarlas o cerrarlas definitivamente y en función de poder tomar la mejores decisiones posibles.
En tal sentido, nuestra mejor actitud siempre debe estar orientada a obtener el mejor provecho posible de todas y cada una de las variantes, facetas, fases o etapas vividas; en mi caso particular, casi siempre intento llevarme lo bueno y trato de aprender mucho de los errores cometidos.
Porque de algo sí estoy segura, es que la vida siempre nos enseña y nos conduce a madurar como seres humanos, y constantemente nos advierte que no debemos perder el tiempo en quejarnos de la vida o de no ser malvados, necios, viciosos, mediocres o egoístas, entre otros tóxicos y dañinos ítems.
Por otro lado, reconozco que muchas veces decimos equivocadamente “la vida me enseña a palos o a los golpes...” Pero no, eso no es así, porque realmente la vida no enseña a golpes...
Es más a la vida no le importan nuestras disquisiciones o decisiones y nosotros mismos somos quienes nos golpeamos o tropezamos con paredes o piedras que están en nuestros caminos; y por descuido, miopía o ignorancia, no podemos ver bien ni con cuidado esos obstáculos en la ruta hacia donde nos dirigimos.
Entonces lo reitero, la vida tan solo nos enseña a crecer y a ser mejores personas, a aprender, a ser perseverantes, disciplinados y comprometidos con nosotros mismos; a ser fuertes, valientes, honestos y justos; y a tener siempre en cuenta que la humildad va por delante de la necia arrogancia y que con Amor y Fe en Dios, todo se puede.
Por tal motivo, yo he decidido cambiar mi vida, mejorar todo lo que tenga que mejorar y eliminar o prescindir de lo que tenga eliminar o prescindir; y aprender bien de quienes deba aprender; y lo demás, especialmente todo lo negativo y paralizante que siga de largo, porque no lo quiero cerca de mi.
En este entorno, clara estoy que los cambios no serán fáciles de lograr, pero mientras más me tarde en hacer esos cambios en mi vida, más lo lamentaré por no hacerlo en el preciso momento.
Equivalentemente, reconozco que a veces será duro dejar atrás todas las cosas que quizás un día nos hicieron felices, pero que ahora nos causan dolor; pero, no hay marcha atrás y si nos toca decidir eliminar ese dolor, sin miramientos, eso se hará; porque en ocasiones las cosas no siempre saldrán como se planean y en consecuencia ocurrirán esos imprevistos que son inevitables y sutilmente harán que todo cambie sin previo aviso.
En definitiva, se que debo aprender a comprender un poco más la vida, aunque me resulta un poco difícil hacerlo; y en mi caso me ha tocado mucho llorar y golpearme muy duro para entender que lo que hacía y creía que estaba bien, realmente estaba mal y en los resultados se evidencian las pruebas de los negativos hechos.
Por lo tanto, requiero con carácter de urgencia poder eliminar lo malo y comenzar de nuevo, apoyándome en los errores cometidos que me han ayudado mucho a ver la vida con sentido y a aceptar que no todo lo que brilla es oro y lo que debe dejar fluir hay que dejarlo correr en libertad y sin tratar de controlar desmedidamente, ni oponernos, ni mucho menos aferrarnos a nada ni a nadie porque nada es nuestro ni eterno.
Es por eso que en mi análisis personal concluyo que debo despertar cada día con una nueva sonrisa de agradecimiento para mi y para quienes me rodean; y debo construir un arcoiris de luz milagrosa para esos días grises que pretendan hacerme sufrir y a entristecerme.
Y en todo momento voy a poner mi mejor cara y sonrisa, dando las gracias a Dios y a la vida por cada día de felicidad y éxito vivido y por cada comienzo en mi maravillosa vida.
Esa es la actitud, siempre pendiente de lo nuevo que surja con agradecimiento por todo el aprendizaje que viene. Saludos.