¡Saludos Steemianos!
Aquí les dejo la continuación del relato de mi colega Yasmielen Beatswine, quien tuvo la oportunidad de darles abrigo en su casa a los jóvenes que partieron caminando desde Colombia hasta Perú para poder emigrar de Venezuela.
Una experiencia que coloca a uno como venezolano en una situación incómoda en ver como ya no importa la manera, con tal de escapar del Socialismo del Siglo XXI.
II Parte
Pedir explicaciones de por qué salieron de Venezuela era inútil, pero sí saber ¿Por qué huían de Colombia? Y por qué iban a Perú es tema conocido. No dejaron siquiera preguntar cuando el chico de 18 años me pregunta ¿Cuántos viven aquí? A lo que yo respondo: somos 4. Sin pensarlo dos veces me suelta la oración, "ustedes están reyes". Yo le digo: ni tanto, nos faltan muchas cosas por amoblar.
Él prosigue, "en el apartamento donde nosotros vivíamos éramos 22, y habían unos que no trabajaban y nosotros los manteníamos para apoyarnos porque chama conseguir trabajo allá no está fácil. Cuando nos vinimos éramos varios y en el camino nos encontramos con otros y al final éramos 16 los que veníamos caminando".
Trago grueso y reflexiono: en verdad si estoy reina. Le comento que leí en las noticias sobre unos venezolanos que venían caminando y otro me responde sin titubear, "somos nosotros, pero no éramos 20 sino 16. Después nos abrimos porque comenzó el egoísmo con la comida y eso no nos gustó".
Había una interrogante pendiente son 4 venezolanos y 2 colombianos ¿Los colombianos por qué viajaban y de esa manera? Ellos me explican que lo hacen como mochileros y piensan llegar hasta Argentina. Estaban en su período de vacaciones universitarias. Ellos viajaban por placer. Ellos si regresarían a la compañía de la familia, tal vez el abrazo de una novia y a su vida académica. Este viaje solo significaba una aventura, pero para los venezolanos no.
Ellos habían dejado todo lo mencionado en Venezuela y ahora los tocaba enfrentar una batalla que tenían que ganar obligatoriamente. Fracasar no se lo tenían permitido después de tanto luchar. Están expectantes de tener un trabajo con remuneración digna, calidad de vida, seguridad, paz y otras tantas bondades que la revolución bolivariana les arrebató sin piedad.
A tal punto que el chico de 18 años dijo sin titubear: "yo cada vez que podía conectarme en un cyber le escribía a mi mamá. Y ella desde Barinas me respondía para darme ánimos y repetirme siempre: no te vengas. No te devuelvas".
Brincaba otra pregunta en el aire ¿A pie recorrieron todo el camino? Entonces me explicaron que hubo un trecho como de 70 kilómetros que caminaron hasta sentir que sus piernas no daban para más. La voluntad también comenzaba a mermar y pensaron en volver, pero la convicción que en Perú les espera un mejor futuro los invitaba a seguir. De resto, se trepaban a escondidas en camiones al estilo "mula", como se dice en Colombia y así atravesaron esas tierras.
Continuará...
Foto de Yasmielen Beatswine junto a los 6 jóvenes
Veo la foto, leo el relato y siento tristeza que lo mejor de Venezuela, sus jóvenes, tengan que huir de este país... y tienen que hacerlo.
Lo mejor siempre está por venir. Dios recompensa la constancia y ellos tienen ganas, fuerzas y fe. Excelente relato.