Tema polémico, @sandracabrera. Por un lado, cada quien debe decidir si quiere hijos o no. Encontrar una pareja para ponerse de acuerdo al respecto no es nada fácil. A veces toca negociar no la decisión de tenerlos, sino cómo criarlos. Definitivamente, nada fácil.
Creo para cualquier decisión, el amor es la clave. Un hijo se ama incluso antes de que nazca; por eso, si no hay condiciones para darle calidad de vida, es mejor esperar y hasta desistir. A veces hay quienes se empeñan en tener hijos por motivos utilitarios, para no envejecer solos o para tener quien los ayude en casa o en el negocio familiar.
Definitivamente, un tema delicado que, por cierto, abordas muy bien (como siempre).
Gracias Marlyn.
Y sí, es un tema muy delicado.
Lo que me ha quedado de todas las reflexiones que tuve al escribir este texto es que definitivamente el tener o no hijo debe ir mucho más allá de las conveniencias sociales, el peso de cultura y la presión familiar.
Es una decisión.
Gracias por comentar.