Hola, no en vano la paciencia es una virtud.
Los problemas hay que catalogarlos en 2:
- Los que están en nuestras manos poder solventar
- Los que escapan de nuestras posibilidades
En el primer lote solo hay que serenarse, un buen compañero de la paciencia es la inteligencia emocional. Solo se debe actuar en consecuencia para solventar el problema o en caso de que sea un objetivo a conseguir, simplemente ir haciendo las cosas de forma correcta sin querer saltarse pasos.
Los del segundo lote son un gran problema porque pueden conllevar a frustración y amargura, lo que a la larga puede desencadenar en odio. En estos hay que aceptar que se escapa de nuestras manos, con humildad debemos reconocer la magnitud del problema, dejar el orgullo a un lado y buscar el apoyo necesario.
Saludos, buen post :)
Gracias, @victorsilab por tu buen comentario!