Oye carolina que bonito tu comentario, que bueno que te gusto. Yo fui a un matrimonio, y los chicos que me llegaron a visitar las cuevas llevaban ese espíritu de alegría ..es más querían que nos sumergiéramos en esas profundidades pero eran como las seis de la tarde ya oscurecía...y jajaj no soy tan valiente como ellos.
De verdad me sorprendió como ellos desafían al peligro y esa ingenuidad de irse al abismo y jugar con esa dinamita y sin temer qe pudieran quedar tapiados en una mala exploción.
Tuve la suerte de quedarme en la casa del Don que era medió dueño de todas esas minas hace algunos años...Una mansión hermosisima en medio esa nada....
Bueno seguiremos leyendo carolina...que alegría que pude sacarte esa sonrisa y esos recuerdos de la infancia.... me imagino y el tinto caliente y la sopita de calabacin...
jajaj un beso y gracias por tu comentario. Hasta ahora recordando subir por la carretera llena de curvas hasta arriba y la neblina...el post ha sido un éxito es el mejor que me han votado espontáneamente y en tan poco tiempo...
Lo escribí anoche durmiéndome noche me faltaron otros detalles, más tarde le pongo otras foticos y corrijo los detalles