Mi papá es doctor. Pediatra neonatólogo, para ser más específico. Se graduó de la Universidad Central de Venezuela y se especializó en la Universidad Nacional Autónoma de México. Tiene apróximadamente 2 años jubilado.
Mi papá disfruta la buena comida. Por lo general es la que a mí no me gusta. En especial la comida marina. Sin embargo, no deja de ser picky con lo que le sirven. "Le falta sal; no está tan dorado; se secó; no me gusta".
Mi papá escucha música clásica por default. Le encantan las sinfonías de Mozart, Beethoven y Bach (entre muchos otros compositores). Cuando sale de su "zona de confort", escucha llaneras venezolanas, música mexicana, jazz, merengues de diferentes países y una que otra balada. Pero no sólo escucha su música, sino que adora enseñar al resto las diferencias, quién canta y hasta datos curiosos sobre las piezas. A pesar de su amor por la música, parece tener dominado un solo instrumento: las maracas.
Mi papá a veces es jardinero. Se mete de cabeza en el jardín desde que se levanta de su cama. A diario, antes de servir su taza de café, riega desde las flores hasta los helechos. Cada 3 o 4 días compra nuevas plantas para sembrar. Poco a poco ha ido brindando más vida ordenada al patio trasero. Ha sembrado de todo un poco. Árboles de mango, aguacate, limón, hasta de mandarina china. Plantas de cambur (banana) y de lechosa (papaya). Flores de todos los colores, lírios, riki rikis, micrófonos (ginger maraca), anturios, aunque sus favoritas parecen ser las trinitarias violeta.
Mi papá tiene tendencias de artista. Además de acomodar las plantas del jardín de maneras específicas, pinta cauchos, macetas y rejillas para hacerlas lucir. Al igual que con el jardín, puede pasar horas en ello, desde las 7am hasta las 3pm. Se entrega completamente, hasta que su espalda diga "basta".
Mi papá es casi un literato. Ha leído incontables veces libros como "Cien años de soledad" (Gabriel García Márquez), "Cantaclaro" (Rómulo Gallegos) y "Don Quijote" (Miguel de Cervantes). Hay otros que jamás suelta, poco a poco se han vuelto parte de él, como "Mitología Griega" (Francesc L. Cardona). Cuánto más los lee, más preguntas al azar hará a quienes estén a su alrededor. Pienso que su aprecio por la buena escritura, ortografía y dicción se debe a tanta lectura.
Mi papá es de otra época. Hay cosas por las cuales se queja que son comprensibles para cualquier persona de hoy en día, pero otras que sólo demuestran que la brecha generacional a veces es enorme. Así quiera aprender y estar al tanto con la tecnología, el hecho de haber nacido en los 40 siempre puede más que él. Su edad y personalidad a veces lo hacen necio y terco. No obstante, todo lo que hace y dice (así no sea de la mejor manera ni con el mayor tacto) lo hace de buena fe. Siempre.
Mi papá está lleno de vida y hace chistes todos los días. Mensualmente cambia una frase que se le habrá pegado de alguna película, video o que haya escuchado por ahí: "como nos gusta". Pero jamás cambiará las que adoptó de mi abuelo y de otros sitios hace muchos años: "muy bueno; chimbo, chimbo, chimbo; yo te voy a decir una cosa...".
Mi papá es todo un personaje.
Regalo para mi papá, hecha por mi hermano cuando estaba en 4to grado, hace unos 18 años