Estoy totalmente de acuerdo con todo lo que expresas en este post, casi me gustaría haberlo escrito yo, porque soy alguien que le tiene ojeriza a la falta de ética y honestidad que tiene quien deja de hacer su esfuerzo productivo para tomar la que ya consigue hecha.
En una oportunidad me ocurrió algo parecido en una página de poesía donde participaba, subí mi creación y a los días la veo con otro autor, por supuesto que hice el reclamo y la persona se ofendió y sus razones eran que había hecho cambios que mejoraban el poema, y que yo debería estar agradecida.
¿Qué tiene realmente en la cabeza la persona que hace esto?, tiene carencias de escritura, no sabe redactar y como no lo sabe no puede valorar, ni respetar el trabajo de escritura que ha hecho la otra persona.
Recientemente escribí un post en Steemit sobre la egolatría y aclaré que iba a tomarme el permiso, de copiar el cuento Confesiones de un Ególatra, de Jaime Ballestas conocido como Otrova Gomas, aparte de indicar quién era el autor del cuento, usé los códigos que se utilizan cuando se va a citar, cometí el error de no colocar la fuente, porque igual tengo el libro y pensé que con decir de quién era la autoría y colocar los códigos bastaría, tal como se hace muchas veces cuando analizamos una canción y la copiamos, lo cierto fue que inmediatamente tenía la amonestación del robot cheetah, aprendí que aún avisando que voy a citar debo colocar la fuente, porque quien sube a la red hace también un trabajo. Pero fue algo irónico que me pasara porque es justo lo que más rechazo. Entonces lo que no entiendo es cómo se dejan colar estas cosas.
Amiga es así, mas hoy en este mundo de la.iconofagia. buenísimo saber de esa experiencia que tuviste y que además expreses esos detalles que parecen no necesarios pero lo son... Este post es para estar pendientes no sólo de los plagiadores de oficio, sino de esos detalles que pueden debilitar un trabajo. Saludos