Todo ha sido medianamente fácil hasta ahora. Hablar de canciones o artistas musicales favoritos me deja en una inmensa zona de confort. Algo no tan fácil sería hacerlo con películas, aunque tampoco es lo más arduo, la variedad es más amplia. Voy, sin ningún orden específico.
Amelie. La película francesa romántica por excelencia, que me hizo buscar y ver más películas con su director, Jean-Pierre Jeunet (Delicatessen) y su protagonista, Audrey Tatou, lo que han sido sorpresas muy gratas. Es una película con un soundtrack que te revive las emociones de una cinta que habla del amor perfecto, largamente buscado, para quienes sienten que son tan distintos que lo que usualmente llenaría a los demás no podría hacerles igualmente felices, pero no están solos sino hay alguien más como ellos afuera. Lecciones de amor, vida y humor.
Pulp Fiction. Mi favorita, por siempre, de Quentin Tarantino, que vi a mis 16 años en un cine caraqueño cuando apenas cumplía la edad. Como en Kill Bill, lo que me interesa no es la violencia sino el homenaje a las películas de los 70, pero además el rompimiento con la línea cronológica, adeás de las míticas escenas del Big Mac, la cita de la Biblia, la búsqueda de la cartera con la inscripción vulgar, la violación que interrumpe Bruce Willis, el baile de Travolta y Uma Thruman y muchas otras. Y el placer de haberla visto muchas veces antes que fuese popular, lo que siempre es arrogante, por lo difícil de transmitir sin sonar así.
- Dancer in the dark. Porque la música me maravilla tanto como el cine raro, esta cinta de Lars Von Trier y su movimiento es la última que Björk prometió hacer por lo extenuante emocionalmente que fue para ella. Un musical con el que me identifiqué demasiado, porque como la protagonista escucho música en todos lados, en cualquier sonido natural o artificial, y también usé lentes. Su soundtrack es fantástico, especialmente el tema I have seen it all, que me hace llorar sólo de recordar su letra, que es cantada a dúo con Thom Yorke de Radiohead.
Love actually. Una película inglesa que como Pulp Fiction, tiene una inmensa lista de estrellas. Es la rica diversidad del amor en parejas disímiles, en fallas y aciertos, en fracasos y éxitos. Me gusta por ser coral, por mostrar parejas jóvenes y con decenas de años juntos, que no hablan el mismo idioma ni viven en el mismo lugar, del amor filiar de los amigos que pasan la vida juntos, del que calla porque ama a la esposa de su mejor amigo. Muestra el amor del primer ministro, del escritor, del doble de una película. Para reír y enamorarse de la vida.
Siete años en el Tibet. Magnífica, política, de autodescubrimiento, amistad y transformación. Siempre me asombra la escena cuando el americano -personificado por Brad Pitt- le dice al Dalai Lama, ya amigos después de conversar tanto del mundo occidental, que alcanza la paz más sublime en su presencia. Tengo idealizada la amistad en mi corazón y eso hace que me guste tanta esta cinta que muestra también la injusticia de la conquista del Tibet por parte de China -aunque no es la única nación que aplastó el sistema comunista- y la fortaleza espiritual de un pueblo ancestral.
Nueve reinas. Cinta argentina que me introdujo de nuevo a mucho más: el cine de este país y a Ricardo Darín, su exponente más reconocido en los últimos años. Claro que he tratado de ver casi todas sus cintas e incluso vi el remake gringo de esta cinta que no lo logra igual. Es una película al estilo Ocean Eleven, en que toda una trama se resuelve de forma grandiosa al final, y en que cada detalle importaba muchísimo, lo que te hace querer recordar qué se dijo antes y volverla a ver de nuevo para disfrutarla desde ese nuevo punto de vista.
Todo está iluminado. Filmada en Ucrania, con Elijah Wood como protagonista, es la historia de un nieto de judíos ejecutados durante la Segunga Guerra Mundial, que va a buscar la historia de abuelo en ese país, al que nunca ha ido. Es una historia hilarante por su co-protagonista, personificado por el cantante de Gogol Bordello, una banda de música gitana-punk-fusión, quien hace en la misma de un joven del este de Europa fascinado con la cultura afroamericana de los 70, pero bajo la luz de los prejuicios y las ideas de entonces, que tiene una perra llamado Sammy Davier Jr Jr y un abuelo que asegura estar ciego pero es el chófer de una empresa turística muy poco profesional. La trama revela una transformación de los personajes en medio de una banda sonora brillante, escenarios naturales bellísimos y el reencuentro con las ruinas de la guerra y el tutelaje soviético.
Gran Torino. Un película magistral de Clint Eastwood, que muestra la transformación de su protagonista, huraño y en conflicto con el mundo por la muerte de su esposa, la distancia de sus hijos y prejuicios raciales por las experiencias bélicas, que lo da todo por una familia adoptiva en medio de la injusticia de las pandillas de su propia nacionalidad, en un paralelismo de la guerra de Vietnam. Y una imagen crística al final: el sacrificio máximo por darle una herencia invaluable, un futuro de paz y rendención.
La Hora Cero. Yo también la vi docenas de veces, pero además tuve la suerte de entrevistar para el periódico a Zapata666, quien personificó a La Parca en una película basada en una huelga médica que sucedió en Venezuela. También tiene míticas escenas con uno de los malandros cantándole "agárrense de las manos" a la Miss Venezuela, el antagonismo con el personaje de Laureano Oliveros y las burlas contra "Chapatín", el médico interpretado por mi actor venezolano favorito por mucho: Erich Wilpret.
Secuestro Express. Poco que añadir, una película que metió al cine venezolano de nuevo en los récords de taquilla, la autoestima y el cariño del público local, logrando reconocimiento internacional y nuevos intérpretes. Budú y Nigga se echan encima la película con los diálogos, como en La Hora Cero. La versión comentaba es buenísima. Recuerda a las películas políticas críticas con Orlando Urdaneta, al mostrar la corrupción, el tabú sexual y la violencia matizada con la pobreza, la injusticia y la presunta poesía del malandro bueno que interpretó DJ Trece.
Me vi La hora cero y Secuestro Express películas que son alucinante ademas de producción nacional te recomiendo también "Azul y no tan rosa" , "papita mani y toston" " una mente brillante" "una abuela virgen" jajajajaja esas por ahora, que buen reto. Saludos.
Me gusta mucho el cine venezolano. Vi todas las que nombras y más. Quiero destacar Reverón :)
Si la lista fuera por las películas que has visto en forma repetida más veces ¿cuál sería? jaja en mi caso Predator como unas 60 veces, quizás más, desde su estreno en el cine.
Jajajaja Rocky IV
Me encantó ver películas venezolanas en esta lista. Buena publicación, Jeanfreddy! :D
Y me faltaron muchas favoritas como Azul y no tan rosa; Elipsis; Papita, maní y tostón I y II; Reverón; La Virgen Negra; Samuel; El Manzano Azul; Piedra, papel o tijeras y Se busca muchacha de buena presencia y motorizado con moto propia.
Hehehe varias. Ya por fin pude ver Papita, maní y tostón. Me pareció buena pero tampoco me dejo impactada ni nada; agradezco más que todo es que estuvo bien hecha.