Yo creo que todo parte del sentido de vida que la humanidad se ha querido implantar desde sus orígenes.
Vemos este mundo material, y es casi inevitable preguntarse si esto es todo lo que hay. ¿Se acabará todo para nosotros una vez que nos llegue la muerte? ¿Lo que hacemos en vida tiene importacia o consecuencias?
Del segundo planteamiento, se determinan las distintas filosofías que las religiones intentan impartir. Se crean mandamientos que, en cierto modo, parten de esta retórica y de una necesidad que surge del bienestar de la sociedad en general.
Porque, por ejemplo, matarnos los unos a los otros, solo empeorá la calidad de vida de la sociedad, por lo tanto, es malo. Y si es malo, lo más probable es que Dios no quiere que se de así y lo prohiba. Si lo haces, te someterás a las concecuencias que ello amerita (infierno). Y basados en ese racionamiento, se sustentan muchas filosofías religiosas.
Lo que intento señalar es que el pensamiento religioso, en mi opinión, no es el resultado ni de la fe ni de la imaginación, sino de un planteamiento filosófico.
No creo que los religiosos que, por dar un ejemplo, aborrezcan el sexo antes del matrimonio, creen fehecientemente en ello por que sí. Creo que su razonamiento llega del hecho de que si lo hace, irán al infierno. Creen que es algo que contradice la voluntad de quien se supone es su Padre y Creador, y pensar lo contrario tiene consecuencias. Es un paradoja que no les permite pensar más allá.
A su vez, las primeras personas que idearon ese pensamiento, probablemente se fundamentaron en el hecho de fortalecer los cimientos de la familia y reducir los embarazos que hubiesen traido muchos niños sin padres (por cosas como la no existencia de buenos métodos anticonceptivos). Y así sucesivamente.