Creo que la felicidad es una decisión, al igual y consecuencia del amor, yo decido ser o no ser feliz, decido amar u odiar lo que hago, lo que vivo, las personas que me rodean, las dificultades y alegrías por las que he pasado.
El amor y la felicidad van de la mano, pero me niego a creer que estos sean unos simples sentimientos o emociones, si así fuera entonces la felicidad y el amor fueran simples placeres hedonistas que van y vienen, pero no es así, estas decisiones trascienden a nuestro ser.
Con respecto a la pregunta, hasta ahora la volvería a vivir con placer una y otra vez, no quiero envejecer más jajajaja, sin embargo soy muy joven para saber lo que me depara el futuro.
¡Saludos! Gracias por compartir.
Jajajaja,
Quizá seamos inmortales.
D.