Te conocí, sin antes de ver tu parte de pervertidismo. Yo siempre quise una relación así, pero todas siempre fueron monótonas. Ahora que estoy contigo, puedo saborear las dos personalidades de ti, puedo disfrutar el amor, el sexo y hacer el amor.
Tengo un hombre con tres personalidades y eso me encanta, me fascina. Puedo hacerte el amor cuando estoy romántico y cuando nos tomamos el tiempo de amarnos al máximo. Cuando solo me siento caliente puedo disfrutarte siendo salvaje y cuando solo me siento cansada, sin ganas de nada, tengo al mismo hombre ahí abrazándome.
Apoyándome y diciéndome ‘’no te rindas’’ estas sembrando lo que estas cosechando y todo eso es bueno para el futuro, se paciente. Ojala y cada mujer encuentre un hombre así, y cuando lo tengo no lo deje ir. Nosotras las mujeres somos el motor principal para que un hombre salga adelante mediante nuestro apoyo en cualquier circunstancia que se nos presente.
Me encanta que para todo tenga doble sentido, mira estamos en una cena y me gusta ser coqueta, y a él le gusta seducirme en momentos incomodos, solo para verme excitada y a la vez abochornada. Por eso me encantas tanto, a veces piensas que me iré, pero no, jamás lo hare. ‘’Eres la mujer que siempre soñé ¿Cómo dejarte ir?’’ dice él.
Mujeres y hombres, si su pareja cumple con TODAS las cualidades que tu requieres, no la dejes ir, como dice, esa es tu media naranja. Sea maduro y no ande probando aquí y allá solo por diversión y probar distintas mujeres. Cuando tienes una así, puedes disfrutar de todo y una mujer fiel y leal a ti vale más que mil putas.
La mejor de las relaciones, es donde hay amor y sana perversión. Muy buena historia. Saludos