El salmo 23 es uno de los más conocidos de la Biblia, encierra una hermosa poesía de adoración y confianza en el Dios proveedor. Fue escrito por David, el rey de Israel que primero fue pastor de ovejas.
Siendo pastor, David sabía que las ovejas requerían de mucho cuidado y amor. También entendía que nadie cumple mejor que Dios las funciones de proteger, sustentar y conducir al rebaño. Con el Señor , tienes todo lo que necesitarás en la vida.
El verso siguiente dice que en lugares de delicados pastos te hará descansar; junto a aguas de reposo te pastoreará. Es en sentido figurado lo citado anteriormente, el lugar donde hallamos esas sensaciones es en la misma presencia de Dios, al buscarlo en oración y al acercarnos a su Palabra, la Biblia, con fe. Es allí donde confortará tu alma; y te guiará por sendas de justicia por amor de Su nombre.
Tal es la seguridad del que se ampara bajo la sombra del Altísimo, que aunque ande en valle de sombra de muerte, no temerá mal alguno, porque Dios estará con él, Su vara y Su cayado le infundirán aliento.
La vara, es una rama delgada y larga que se utilizaba como apoyo en el camino del caminante. El cayado, es un bastón grueso, generalmente de madera con el extremo superior curvo, los pastores lo usaban para guiar, proteger, estimular y contar sus rebaños.
El Señor adereza mesa delante de ti en presencia de tus angustiadores, lo cual significa que te bendecirá delante de los que desean tu mal. No temerás a la envidia ni a tus limitaciones, porque el que sirve la mesa y la llena de alimentos es Dios, para que los disfrutes rodeado incluso de los malvados, que reconocerán que Dios es tu proveedor y compañero.
El que permanece en la presencia de Dios dirá: ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida, y en la casa de Jehová moraré por largos días.
¡Dios te bendiga!
Muy buen post, que nos recuerda que Dios esta a nuestro cuidado.
amen