Yo siempre digo que el color rojo y yo, estamos divorciados. ¿A qué se debe esto? bueno, se debe a que la “revolución” de este país se apropió de él. La misma que ha destruido cada aspecto de lo que alguna vez fuimos y lo que soñábamos ser. Por lo anterior, pensar en rojo, es pensar en esta gente, en sus consignas, en su propaganda y atuendos. Pero, hay un gran “pero”… Estoy bastante clara que es un color hermoso que denota energía, pasión, vida, fuerza, valentía, vigor, que siempre me gustó, siempre lo amé y espero volver a usarlo como antes.
En cuanto al reto correspondiente al día de hoy, traigo una foto que siempre me ha gustado desde que la tomé. Ningún otro color hubiese lucido tan bien como lo hace el rojo en esa fachada junto al contraste de esa calle empedrada.
El casco histórico de Coro, trae estas vistas bonitas. Caminas por allí y sientes que perteneces a otra época. Esa casita en particular, atrapa tu atención inmediatamente. A pesar de que está rodeada de otras lindas casas, ella resalta bien pretenciosa con su rojo intenso.
Esta es mi participación en el #colorchallenge Monday Red el cual fue iniciativa de @kalemandra.
Aquí, la casita roja pretenciosa del Caso Histórico de Coro.
Casa de la calle empedrada
Fotografía tomada por @orianaalej
La cámara usada fue mi teléfono de entonces, un iPhone 4S
Espero les haya gustado.
Jajaja lo mismo me pasa con ese color. Me gustaría usarlo más, pero ya es inconscientemente rechazado por mi cerebro.
¡Me encantó la foto!
Creo que nos pasa a muchos, Jorge. Y tal y como lo dije, me encanta pero lo evito (por lo menos en ropa). Gracias por comentar.