Fernando
Me enamoré de Fernando con pasión y locura, que cuando me dejó por otra mi corazón sangre llora. Para olvidar mis penas decidí irme de compras y caminando por una tienda en una de sus vitrinas vi un maniquí cuyo parecido con Fernando era asombroso, tenía que tenerlo, así que entre en la tienda y lo compré. Lo llevé a mi hogar donde me acompaña y mantenemos largas conversaciones donde puedo contarle lo que me pasa, y aunque no obtengo respuesta puedo desahogarme.
Pero un día mi mamá que odia a Fernando llegó de improviso a mi casa, veíamos un juego de fútbol en la televisión, tuve que esconder a Fernando y apurada lo tiré encima del armario.
Oh Steemitri-Fernando, jaja!
Gracias y saludos!