Cuando las palabras están llenas de sentimientos, miedos u otros motivos pueden causar efectos contraproducentes y si la persona que las dice es importante para nosotros el efecto es mayor, me imagino la escena de Jesús al principio del post, tu pensando sobre su mal aliento y el viéndote actuar,diciendo lo contrario,pero conociendo cuales son tus pensamientos.....
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Así es!