Dos grandes poemas, @isauris, que se sienten y se viven casi que a diario. Es inevitable soltar unas cuantas lagrimas mientras los re-leo y me ubico en esos recuerdos [que] queman pero que gritan al igual que esa última estrofa que
no más abrazos de triste despedida.
Yo solo quiero abrazos de mi pueblo,
cantando alegres, cantándole a la vida.
Es un honor leerte y deleitarme con tus letras. ¡Siempre exquisita!