¿Y si me atrevo a besarte?
¿Que tal sino lo hago por miedo?
¿Y si arruino nuestra amistad por esta tentación?
¿Y si arruino su amistad por esta sensación?
¿Y si tus besos hacen cosquillear a mis labios?
¿Y si cada roce entre tu y yo es nuevo para mis sentidos?
Todas estas preguntas inundaban mi cabeza durante la noche sabiendo que estabas justo al cuarto de al lado completamente solo donde te indicamos, pero yo no estaba sola en el mio, tenia alguien a mi lado que me impedía escabullirme, que no me dejaba libre; ¿como hago para poder salir de aquí?¿como hago para huir de el y llegar a tus brazos?¿como hago para que deje de tener poder en mi?¿como hago para avanzar?
Mientras duerme profundamente decido hacerlo, decido irme de ahí, decido alejarme de el, que solo me trae dolor, soledad; mientras que tu me llenas, me haces sentir viva, alegre, alguien que vale la pena.
Camino por el pasillo lentamente, sintiendo la fría cerámica bajos mis pies, mis pasos son cortos, dudosos, llenos de miedo a que el se entere que me fui, pero sobretodo con miedo a tu rechazo. Al llegar a tu puerta tomo el pomo entre mi mano y lo giro muy despacio y me adentro a tu cuarto.
Al sentir la luz abres los ojos, me miras con confusión y me preguntas ''¿Que haces aquí?''. Me petrifico por unos instantes y al oír la repetición de tu pregunta reacciono, me acerco a tu cama, me siento encima de ti y te respondo ''Vine a hacer algo que he querido hacer durante mucho tiempo, solo te pido que cierres los ojos, por favor'', imagino que al ver mi cara de suplica accedes cerrando así tus ojos, lo que agradezco profundamente porque me llena de valor. Me acerco poco a poco a tu rostro y te beso, te beso suavemente, te beso de una forma que transmita todo lo que siento, te beso apasionadamente al sentir como me acercas a ti para profundizarlo, te beso mas fuerte por tu aprobación, te beso como nunca lo bese y te beso como jamas lo besare a el...