Es cierto que la tecnología ha cambiado la forma en que experimentamos los lugares y paisajes, también nos ha ayudado a comunicarnos con amigos y familiares que están lejos, y a muchos nos ayudó a sobrellevar la pandemia, para no sentirnos tan lejos de las demás personas. Muchas veces, la gente está tan absorta en sus dispositivos que se pierden de disfrutar y apreciar lo que los rodea. Es una lástima que la conexión con la naturaleza y los paisajes se esté perdiendo debido a la dependencia de la tecnología.
A pesar de esto, siempre habrá personas que valoren la belleza de un paisaje y se tomen el tiempo para admirarlo. Es importante recordar la importancia de desconectar de vez en cuando y disfrutar de la naturaleza y los paisajes que nos rodean. No hay nada como la sensación de asombro al contemplar un hermoso paisaje en persona o ver un ave volar, algo que no se puede experimentar a través de una pantalla. Esperemos que la sociedad pueda encontrar un equilibrio entre la tecnología y la apreciación de la belleza natural.
Lo comento porque hace unos días estaba caminando con mi esposo por la av. Panteón, porque tenía una cita médica en el hospital Vargas por una torticolis, antes de llegar paso por debajo de un árbol y de repente me cae una semilla en la cabeza, gracias a mi don de observar todo lo que me rodea, vi unas lindas guacamayas en un árbol que estaban comiendo frutas , ha por eso fue que me cayó una semilla en la cabeza pensé, vi alrededor y observe toda la gente que pasaba inadvertida de lo que en ese momento ocurría, un acontecimiento tan inusual por estar pendiente de un celular.
En lo particular me encantan mucho las aves y fotografiar cosas, y solo pensar de que hay mucha gente que está más pendiente de lo que pasa en el celular y menos de lo que nos rodea me hace sentir un poco triste. A veces nos perdemos de cosas maravillosas por estar tan concentrados en nuestros dispositivos electrónicos. Desde ese día, trato de estar más presente en el momento y disfrutar de las pequeñas cosas que me rodean, como las aves que vuelan sobre mi cabeza o las flores que crecen en el camino. Creo que es importante estar conectados con la naturaleza y con lo que nos rodea para tener una vida más plena y feliz.