Pero Gabo, por amor al arroz... No se mete el teléfono en el pantalón de playa y menos si está mojado. El salitre te lo daña inmediatamente. Es más, uno lo usa un momento y lo guarda, no vaya a ser.
Yo vivo en una ciudad de mar y hay cosas que enseñarle a los chicos de las alturas.
Pero Ana hazme el favor, no le eches sal a la herida, dame cariño y amor que ando sensible por mi perolito...
Sabes que es lo peor? Jajaja que yo tranquilazo bañandome en la playa por un buen rato y cuando salgo siento algo pesado en la pierna y me toco rapidito, entonces sentí el teléfono... jajajaja
Jajajjaja Lección aprendida