Tiempos Turbulentos
Creo que una de las cosas que más se ha popularizado dentro del mundo médico son los maltratos. Y hay muchas variantes de esto, porque no solo es maltrato del que te gritan, o te humillan, que de eso hay de sobra, si no que por alguna extraña razón está esa creencia que mientras más sufres durante tu formación, mejor médico eres, cuánto peor sean las condiciones de trabajo, mientras peor te vaya en una guardia, mientras menos descanses... al parecer por creencia popular mejor medico serás...
Yo no sé porque siendo profesionales de la salud que se supone entendemos que el concepto de salud engloba "bienestar desde el punto de vista bio psico social" y que si alguno de esos pilares fundamentales falla, el resto de cosas terminará por caer. Seguimos empeñados en justificar formación con sufrimiento, con excusas baratas de que "En mis tiempos era peor". Yo pienso que de los errores se aprende, y que si ya sabemos cómo algo no funciona, no podemos empeñarnos en seguir insistiendo en ese modelo.
Yo siempre he procurado tratar al resto como me gustaría que me tratarán a mi. Mis residentes de años inferiores, incluso mis internos de pregrado procuro explicar dentro de mis posibilidades, sin malos tratos, sin humillaciones, porque se y tengo muy presente que en algún tiempo yo también desconocía muchas cosas, yo también tenía dudas y miedo, y que bonito fue conseguir personas en mi camino que me brindaron su mano amiga para mí formación, es por eso que procuro siempre enseñar siempre de la manera más empática, tal y como me encantaria que me explicaran a mi.
En fin, se que una vez más descargo todas mis inconformidades nosocomiales en este blog. Pero creo que hacer un llamado de atención en general, a ver si de una vez por todas logramos entender que una persona después de más de 12 horas de trabajo no funciona igual, y que puede cometer todo tipo de errores por el cansancio. Y que si está falta de descanso se prolonga en el tiempo puede conllevar a desarrollar patologías mentales. Fomentar un poquito la empatía, dejar de lado los egos y los rangos absurdos, para pensar en como mejorar la calidad de atención al paciente, eso definitivamente cambiaría radicalmente la manera en la que se vive una residencia médica actualmente.
Creo que no es justo que un residente viva pensando que es el peor médico del mundo, creo que no es bonito que te recuerden que no sirves, que te equivocas, que te recalquen que estar cansado está mal, porque en sus tiempos se hacían guardias de más horas, que te obliguen a escribir a mano alzada, soll porque en sus tiempos se hacía así y no existían computadores, retrasando mas de lo normal el trabajo. Hay tantas cosas mal en este mundo nosocomial, que a veces lo que provoca es llorar y tirar la toalla, porque dices, yo no he pasado tantos años estudiando y esforzándome para vivir en esta miseria, es difícil hacerte entender que tú no mereces esos tratos, y que eso no te afecte psicológicamente es todo un reto,mantenerte cuerda.
Pero bueno, como me dijo un profesor un día, residente solo se es por 3 años, pero especialista toda la vida. Y de mi parte queda, como una promesa a mi misma, no convertirme en ese especialista testarudo y obstinado que no da su brazo a torcer y que piensa que como sufrió durante su formación, todos deben vivir lo mismo. Por los momentos me despido, nos vemos en una próxima publicación.