Muchas gracias por tu apreciación, Nancy.
En efecto, el perdón termina siendo en primera estancia un beneficio personal; una carga menos; sin embargo, hay escenarios en dónde el perdonado puede agarrar fuerza y nutrirse de esa energía, aunque este no debería ser el factor principal.
Creo que es complicado empezar el acto del perdón a la espera de algún resultado externo puesto que suele nacer desde un espacio silencioso dentro del corazón, luego de mucho tamboleo mental y emocional.
¡Gracias por pasarte! Saludos.