Perdí mi móvil, alguién se adjudicó el derecho de «tomarlo» sin permiso de mi bolso, cuando abordaba un ómnibus de la ruta A3, que estaba lleno, en San Miguel del Padrón, municipio de residencia. Desesperada por llegar a casa, después de culminar mi jornada laboral, el pasado jueves.
Para nosotros perder ese medio significa mucho, no solo por el equipo sino por todo lo que guardamos en él: información personal, fotos familiares, recuerdos, redes sociales. Muy necesario para estar comunicado con tus seres queridos, amigos.
Llegue a casa llorando y fuí a casa de mi vecina quien llamo a ETECSA (Empresa de telecomunicaciones) para que bloquerán mi línea.
Estaré medio incomunicado con el mundo, hasta que pueda recuperar mi línea telefónica en ETECSA y comprar otro móvil cuando mi presupuesto me lo permita.
Por desgracia, el robo de móviles sigue siendo una realidad a la que nos enfrentamos cada día, y son los autobuses o guaguas el lugar favorito para los ladrones.
Los celulares, son dispositivos demasiado caros y que a veces no protegemos lo suficiente (o nos lo olvidamos), convirtiéndose en un blanco demasiado jugoso para los carteristas, gente sin escrúpulos, ni valores, en mi país.
Siento mucho y estoy sufriendo su ausencia, ya que en mis horas de desvelos nocturno, me aferraba a su uso consultando las redes o jugando algún juego, hasta se me cansará la vista y regresará mi sueño.
Muchos son sus usos, todos lo sabemos, ahora me falta, me siento triste y emocionalmente deprimida.
Las denuncias de robos y asaltos en los barrios y el transporte público han aumentado en los últimos meses en Cuba, en una de las mayores crisis económicas que está atravezando el país.
De regreso al trabajo, en mi horario de descanso escribí está publicación.
Cuando la lean me hagan llegar sus comentarios.
Muchas gracias
I lost my cell phone, someone took the right to “take it” without permission from my bag, when I was boarding a bus of the A3 route, which was full, in San Miguel del Padrón, my municipality of residence. I was desperate to get home after finishing my workday last Thursday.
For us to lose that medium means a lot, not only for the equipment but for everything we store on it: personal information, family photos, memories, social networks. Very necessary to be communicated with your loved ones, friends.
I came home crying and went to my neighbor's house who called ETECSA (telecommunications company) to block my line.
I will be half cut off from the world until I can get my phone line back from ETECSA and buy another cell phone when my budget allows me to do so.
Unfortunately, cell phone theft is still a reality we face every day, and buses are the favorite place for thieves.
Cell phones are too expensive devices and sometimes we do not protect them enough (or we forget), making them too juicy a target for pickpockets, people without scruples or values, in my country.
I am very sorry and I am suffering its absence, since in my sleepless hours at night, I would cling to its use consulting the networks or playing a game, until my eyes would get tired and my sleep would return.
Reports of robberies and assaults in neighborhoods and public transportation have increased in recent months in Cuba, in one of the biggest economic crises the country is going through.
On my way back to work, during my break time, I wrote this publication.
When you read it, please send me your comments.
Thank you very much for your comments.
Translated with DeepL.com (free version)
Contra Merci, que pena!! No sabía nada. Verdaderamente, es un golpe duro para nosotros los cubanos de a pie que pasamos tanto trabajo para conseguir las cosas y más un artículo como un celular. Pero, tranquila ya volverás a tener otro movil y quizás mejor. Saludos
Gracias amigo, ojala tus palabras sean santas. Dios así lo va a querer. Un abrazo