Difícil escribir en un post, que ha de ser breve, acerca de una de las figuras más relevantes de la literatura universal (oriental y occidental). Me refiero al escritor japonés Yukio Mishima, de quien se cumplen cien años de su nacimiento (14 de enero de 195).
De su amplia obra novelística —también dramatúrgica y ensayística—, un comentario de un fragmento de Confesiones de una máscara (1949), quizás el texto que más aprecio.
Sus ojos habían visto que la relaciones humanas, los amores, los odios, la razón, el derecho a la propiedad, todo se convertía en llamas. y, en aquel momento, no lucharon contra las llamas, sino que lucharon contra las relaciones humanas, contra los amores y los odios, contra la razón, contra el derecho de propiedad.
Puedo hacer muchas otras citas de esta conmovedora novela de Mishima, pero considero que esta nos da una apreciación de su visión y estilo, y solo queda a los lectores buscar sus novelas, dramas o autobiografía.
La visión de la complejidad de la vida, que indudablemente tuvo Mishima, queda ya reflejada en su primera novela. Hacer que la vida sea, más que una lucha, un logro, será un reto, que Mishima no pudo superar. El 25 de noviembre de 1970 se practicó el harakiri, el suicidio ritual japonés.
Referencia:
Mishima, Yukio (1979). Confesiones de una máscara. España: Edit. Planeta.