Pero en clases me di cuenta de que el pensamiento crítico tiene mucho que ver con el sentido del gusto, por lo que naturalmente este se desarrolla bajo enfoques determinados sobre conceptos que sean del agrado o del interés de dicha persona.
No apoyo esa tesis por cuanto para ser un pensamiento crítico, este debe ser objetivo. Si mi opinión está basada en mis creencias, en mis valores personales, en lo que le agrada a mi oído, no es sentido crítico, es, más bien, mi punto de vista.
Un pensamiento objetivo sobre algo en concreto puede verse como un diagnostico, pero las personas son muy subjetivas a la hora de ser criticas en algunos razonamientos.
Lo que digo es que difícilmente se puede opinar a profundidad sobre algo en específico sin tener ciertas implicaciones racionales sobre ese algo.
Por ejemplo:
Un catador de alimentos o un crítico gastronómico.