Imagen editada en PowerPoint Fuente
Hoy era un día muy especial para Ana: ¡su quinto cumpleaños! La emoción llenaba la casa desde la mañana. Ana despertó con una sonrisa radiante, lista para un día lleno de sorpresas y alegría.
Al bajar las escaleras, Ana encontró la casa decorada con globos de colores y un aroma delicioso a pastel. Sus padres la recibieron con abrazos y besos, deseándole un feliz cumpleaños. Ana, con ojos brillantes, sopló las velas de su pastel y todos cantaron "¡Feliz Cumpleaños!".
Los regalos envueltos con cariño esperaban a ser abiertos, revelando juguetes coloridos y libros llenos de historias emocionantes. Ana estaba encantada con cada sorpresa y agradecía a todos por hacer su día tan especial.
La abuela, quien también estaba presente, le entregó un regalo especial: un álbum de fotos que capturaba los momentos más adorables de los primeros cinco años de Ana. Juntas, madre, padre y abuela, recordaron y celebraron cada etapa del crecimiento de Ana.
Al caer la tarde, la casa se llenó de risas y juegos. Ana, rodeada de amor, sopló las velas de su segunda torta, esta vez junto a sus amigos del vecindario. Los juegos, la música y los dulces hicieron que el día fuera inolvidable.