Mi día comenzó temprano, cómo todos los días dando gracias a Dios por un nuevo amanecer, me levanté y fuí al baño a mi rutina diaria de aseo personal, me vestí, tendí la cama y fuí a la cocina a preparar el desayuno, coloqué el agua para el café y comencé con las arepas, hoy las hice normal solo con harina de maíz, para el relleno use aguacate y tocineta.
Al terminar de desayunar arreglé la cocina, luego me senté a postear mi diario y a responder mensajes así cómo apoyar algunas publicaciones, saludar en los grupos de telegram.
Después hice algunos oficios que tenía pendiente, entre ellos limpiar la nevera.
Luego comencé a preparar el almuerzo, hoy tenía ganas de comer sopa de pollo y aproveché de llevarle a mi amiga que aún está de reposo por el covid, la sopa de pollo siempre cae bien cuando estamos enfermos, ella tenía su consulta a las dos de la tarde, está mejor pero aún debe guardar reposo.
Después de almorzar mis hijos se encargaron de ordenar y lavar los platos, yo me senté a revisar mi teléfono y a responder unos mensajes, luego continúe con mi manualidad, ya llevo muchas horas y lo que me falta, pero la verdad disfruto mucho enrollando mis papelitos.
A las cinco me preparé para salir un rato en bicicleta, estuve media hora dando vueltas en el urbanismo, al llegar a casa descansé un poco y luego me fuí a duchar.
Mi hija se encargó de la cena, hizo una ricas empanadas de queso, siempre digo que son mejores que las mías y es verdad, yo mientras seguí con mi manualidad.
Después de cenar llamé a mi papá, que está en otro estado de país y hablé un rato con él, al terminar de hablar me senté a ver tv en familia.
Hasta mañana amigos.