Gracias Paloma por brindarnos este hermoso recorrido por tu estancia en aquel lugar donde habitaban tus abuelos, realmente como buena llanera amo esos lugares, me hinchan el pecho de emoción, el contacto directo con la naturaleza es una de las mejores terapias curativas para el alma.
Y gracias por regalarnos esa breve enseñanza acerca de la Pachamama. Me encantó leerte, hasta me transporté a la finca que cuidaban tus abuelos. ¡¡Un abrazo amiga!!
Ayyy qué bonito lo que me dices, querida amiga. Me alegra saber que has vivido este tipo de experiencias. Era una vida muy dura, y al tiempo tan feliz con los pequeños detalles del día a día.
La Naturaleza nos lo da todo, somos parte de ella y, como bien dices, nos cura el alma. Gracias por haber compartido mis recuerdos por un ratito, y por detenerte a comentar. Un abrazo fuerte. 🤗