Mucho se habla y se escribe acerca del pensamiento, y como este, con vida propia, se encarga de sabotear nuestras decisiones, hasta imponerse y lograr lo que pareciera ser su cometido: el insomnio, la depresión, la tristeza y la dificultad para tomar decisiones y la generación de expresiones lapidarias.
El comportamiento del día a día está dominado por la manera como hayamos digerido una información. La noche del 31 de diciembre, un conocido, quien está en otro país, alarmado por una situación dramática, que acababa de destaparse en el noticiero, escribió un mensaje insólito en sus redes, donde despotricaba del año nuevo, rechazaba cualquier intento de salutación y dejaba un mensaje que decía más o menos así: «ojalá nunca tengas que estar en los zapatos de ..» y ahí describía la situación, «es mi deseo para el 2025».
Mi pensamiento que no es nada dócil se impregnó de esa batalla, que llevaba este ser, y me puso a analizar cuántos hechos lamentables se producen cada día, que ahora nos enteramos más, porque vivimos apegados a las redes, y según sea nuestra naturaleza de búsqueda, el bombardeo será mayor.
Pareciera que mientras nace una rosa, se seca un árbol, como si lo desastroso fuese mayor; pero... ¿ Es así realmente o es nuestra manera de mirar?
Por cada muerte que se produce diariamente, ocurren nacimientos, muchos de ellos esperados, ansiados, recibidos en el más intenso amor. Hay también seres que se van o están por irse y no reciben lo que el común de la gente espera, que se le dé, al que se va de este mundo. Muchos se van rodeados de abrazos y besos, quizá porque eso fue lo que fomentaron a lo largo de toda su vida, otros, no cuajaron amor en ninguna parte, todo lo contrario, se encargaron de arrancar de raíz cualquier hierba amorosa que salía de manera espontánea.
Así es la vida, hay pozos de agua dulce y hay charcos malolientes; hay gente maravillosa y entusiasta y hay quien no se le puede llamar gente; hay besos caricias y abrazos pero también arrebatones, empujones y amenazas. Tenemos una cuota de vida, e ignoramos cuál es su límite. ¿Cómo vamos a avanzar, aferrados a lo duro incomprensible y difícil o empeñados en sembrar amor y esperanza?
El pensamiento puede contaminarse y asfixiar la creatividad, las ideas luminosas, la magia del ingenio, entonces nos volvemos fríos e insensibles, ásperos, amargos y eso repercute en el entorno, invariablemente, esa energía negativa con la que nos despertemos se contagia a nuestro ambiente, de eso estoy completamente segura, es una energía que llena de bruma, no deja ver bien ni oler ni siquiera tocar con las manos limpias porque todo se llena de tizne y eso mancha.
Procurar que no nos afecten las situaciones diarias es un trabajo complicado, el pensamiento se encarga de repetir lo que no queremos ver u oír. Pareciera que hay que educarlo, hacerle sentir y escuchar lo mejor de cada día. Limpiar los alrededores del pensamiento, desinfectar toda área oscura, que pretenda impregnar de fealdad la vida.
No es fácil, es un trabajo diario, pero hacerlo va trayendo, paso a paso, la satisfacción de conquistar el sueño profundo y reparador, que todos necesitamos, no somos los hijos de la oscuridad, somos seres de luz y todo lo que podamos irradiar con energía positiva, se volverá una ventana de escape para airear la propia inteligencia.
Gracias por tu amable lectura.
Mi contenido es original.
He utilizado el traductor de Google.
Imágenes de Pixabay con su respectiva fuente.
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English Version
Much is said and written about thought, and how it, with a life of its own, is responsible for sabotaging our decisions, until it imposes itself and achieves what seems to be its purpose: insomnia, depression, sadness and difficulty in making decisions and the generation of lapidary expressions.
Our daily behavior is dominated by the way we have digested information. On the night of December 31, an acquaintance, who is in another country, alarmed by a dramatic situation that had just been revealed on the news, wrote an unusual message on his social networks, where he ranted about the new year, rejected any attempt at greeting and left a message that said more or less like this: "I hope you never have to be in the shoes of .." and there he described the situation, "it is my wish for 2025."
My thoughts, which are not at all docile, were impregnated with that battle that this being was carrying out, and it made me analyze how many regrettable events occur every day, which we now find out more about, because we live attached to the networks, and depending on our nature of search, the bombardment will be greater.
It seems that while a rose is born, a tree dries up, as if the disastrous were greater; but... Is it really like that or is it our way of looking at it?
For every death that occurs daily, births occur, many of them expected, longed for, received with the most intense love. There are also beings who leave or are about to leave and do not receive what the common people expect, that is given to those who leave this world. Many leave surrounded by hugs and kisses, perhaps because that was what they fostered throughout their lives, others did not develop love anywhere, on the contrary, they took it upon themselves to uproot any loving weed that sprouted spontaneously.
That is life, there are wells of fresh water and there are smelly puddles; there are wonderful and enthusiastic people and there are those who cannot be called people; there are kisses, caresses and hugs but also snatches, pushes and threats. We have a quota of life, and we ignore what its limit is. How are we going to move forward, clinging to the hard, incomprehensible and difficult or determined to sow love and hope?
Thought can be contaminated and suffocate creativity, bright ideas, the magic of ingenuity, then we become cold and insensitive, harsh, bitter and that has repercussions on the environment, invariably, that negative energy with which we wake up spreads to our environment, I am completely sure of that, it is an energy that fills us with fog, does not let us see well or smell or even touch with clean hands because everything is filled with soot and that stains.
Making sure that we are not affected by daily situations is a complicated job, thought is in charge of repeating what we do not want to see or hear. It seems that we have to educate it, make it feel and hear the best of each day. Clean the surroundings of thought, disinfect every dark area, that tries to impregnate life with ugliness.
It is not easy, it is a daily job, but doing it brings, step by step, the satisfaction of conquering deep and restful sleep, which we all need, we are not the children of darkness, we are beings of light and everything we can radiate with positive energy, will become an escape window to air out our own intelligence.
Thank you for your kind reading.
My content is original.
I used Google Translate.
Images from Pixabay with their respective source.
Usted con su lectura nos adentra en profundidades permitiendo ver en lo cotidiano, la luz que somos...
De hecho conectarse con el pensamiento positivo es una practica evaluada porque la mente siente esta alerta, observando, creando, en dialogo, es cuestión como ud. menciona educarlo.
Gracias, @aguamiel, porque captas el sentir de lo que quiero transmitir. No se trata de ser insensible hacia la realidad sino tratar de proyectar lo positivo en una búsqueda de lo hermoso y luminoso para tener mejores experiencias. Abrazo
Esto permite mantener la energía en lo alto, aunque suceda de todo en el cotidiano.
🩷
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Me aterra la contaminación del pensamiento y siempre me pregunto hasta dónde algo es mío o no...
Buen contenido, como siempre, @charjaim
¡Gracias!
Hola @charjaim. Profundo contenido, amiga. Soy gran entusiasta del pensamiento, los veo como "seres abstractos", que siguiendo tu tónica, pueden ser malvados o benignos, y aunque es fácil decir que todo está en aquello con lo que te conectas, en la práctica cotidiana se requiere ir más allá, pues el pensamiento en intrusivo, rebelde y persistente, pero para nuestro beneficio, no son independiente, son nuestros por lo que podemos guiarlos por el lado que más nos guste.
¿Qué requiere esfuerzo, dedicación y de muchos "darnos cuenta"?, es cierto, sin embargo, pero la recompensa, la satisfacción de conquistar el sueño profundo y reparador, bien lo vale.