Te entiendo, a mí me habría ocurrido igual en una moto, el miedo paraliza y de verdad que yo no entiendo a la gente que puede gustarle esas atracciones mecánicas. El carnaval y el juego con agua me gusta, pero en familia, con extraños nunca. Cuando estoy en casa de los nietos soy la primera que comienza a mojarlos, me divierte verlos mojarse.
Gracias por contarnos.