Marta nunca se cambió de la carrera de medicina, en la universidad, para estudiar enfermería, que le gustaba más, pensando en lo que iban a decir sus padres. Ella dejó de trabajar como médico inmediatamente después de que se casó.
Roberto desechó la idea de estudiar para sacerdote de una iglesia católica por casarse, pensando en lo que dirían sus familiares. Se divorció a los 3 años, con un hijo, prácticamente recién nacido.
Javier, con 60 años, nunca pudo viajar ni estudiar en el extranjero, por abrir un restaurante como el que sus padres tenían, simplemente, por seguir la tradición familiar y por no enfrentarse a las opiniones de ellos.
Y así, muchos casos en los que la opinión de otros, aparentemente, les ha impedido realizar sueños o desarrollar habilidades que deseaban desarrollar.
¿Qué tanto pesa lo que piensen los otros en la vida de alguien?
¡Nadie puede vivir tu vida!
Este domingo, en reflexiones de vida en Séptimo Día, hablamos sobre el peso que tienen las opiniones de los demás en las decisiones que tomamos.
¿Es que, nos olvidamos que nadie puede vivir tu vida, que tu camino es único y que nadie puede recorrerlo por ti?
Pero igual, todos, de una u otra manera, emitimos nuestra opinión o criticamos, porque es una manera de liberar pensamientos y, porque muchas veces, nuestra autoestima permite que existan apreciaciones que vemos como mejores que las nuestras.
En realidad, esto es inevitable.
Nosotros somos seres sociales que necesitamos de la opinión de los demás y de la ayuda de otros para poder existir.
E, igualmente, nuestras acciones agradan o desagradan al entorno, y esto puede ocasionar conflictos o bienestar.
¿Cómo sacar la mejor versión de nosotros si tenemos que hacerle caso a la opinión de los demás?
Fortalece tu confianza
La única manera de que las opiniones de los otros no te afecten tanto, es generando confianza en ti mismo.
Debes conocerte, saber lo que quieres, lo que vales, tus fortalezas y tus debilidades y, de esta manera, corregir o desarrollar.
Independientemente de lo que los demás digan, siempre habrá alguien para quien lo que vas a comenzar a hacer es un error.
Lo importante es que atiendas las conductas que hay en ti, que te dicen, que te está afectando en demasía la opinión de los otros.
Así, si tienes una alta sensibilidad, un temor elevado al rechazo y ansiedad de mostrar tus ideas a las otras personas, es muy probable que debas buscar ayuda para liberarte de la opinión de los demás.
Se hace necesario que trabajemos nuestra autoestima, aceptando nuestras deficiencias y, por supuesto, trabajarlas.
Ah, y claro, aprender a imponer límites y a expresar nuestras opiniones, muchas veces, sin rendir tantas explicaciones.
Una actividad interactiva: ¿Somos causantes de la ansiedad en los otros con nuestras opiniones?
Sabemos que, debemos fortalecer nuestro interior para poder liberarnos, un poco, de la opinión de los demás.
Sin embargo:
¿Cómo nos liberamos de dar excesos de opiniones?
¿Estamos siendo empáticos, educados y respetuosos con los otros, a la hora de emitir nuestras opiniones?
Veamos estos tres casos —puedes hablar de los tres o hablar solamente de uno— y déjanos en los comentarios, tu opinión o cómo, en el caso de que debieras darla, sería tu opinión ante estas situaciones:
Lucía es madre soltera y tiene una hija de 15 años, quien le ha dicho que está enamorada de un chico de 21 años. Lucía ha decidido dejar que el joven visite a su hija, porque es preferible que se vean en su casa y evitar que lo hagan en la calle.
José Luis no quiso darle dinero a un señor en situación de calle, porque tenía aspecto de borracho y, por lo tanto, era muy probable que fuera a comprar licor con ese dinero.
Julia, quien está a punto de culminar sus estudios de secundaria, tiene una gran indecisión entre estudiar derecho o filosofía.
Emitir nuestra opinión es algo que solemos hacer constantemente; es necesario, vivimos en sociedad y nos interrelacionamos los unos a los otros.
¿Pero, hasta dónde pueden llegar nuestros niveles de intromisión?
¿Hasta dónde podemos ofender o no?
What others say! Does it affect you or are you the one who affects with opinions? -Reflection and Interaction on Sunday of 7th Day-
Marta never switched from a medical career at the university to study nursing, which she liked better, thinking about what her parents would say. She stopped working as a doctor immediately after she got married.
Roberto discarded the idea of studying to become a priest in a Catholic church to get married, thinking about what his relatives would say. He divorced at the age of 3, with a son, practically just born.
Javier, at the age of 60, was never able to travel or study abroad, for opening a restaurant like the one his parents had, simply for following the family tradition and for not confronting their opinions.
And so on, many cases in which the opinion of others has apparently prevented them from realizing dreams or developing skills they wanted to develop.
How much does what others think weigh in someone's life?
No one can live your life!
This Sunday, in Seventh Day Life Reflections, we talk about the weight that the opinions of others have on the decisions we make.
Do we forget that no one can live your life, that your path is unique and that no one can walk it for you?
But still, we all, in one way or another, issue our opinion or criticize, because it is a way to release thoughts and, because many times, our self-esteem allows that there are opinions that we see as better than ours.
In reality, this is inevitable.
We are social beings who need the opinion of others and the help of others in order to exist.
And, equally, our actions please or displease the environment, and this can lead to conflict or well-being.
How can we bring out the best version of ourselves if we have to listen to the opinion of others?
Strengthen your confidence
The only way to not be so affected by the opinions of others is to build confidence in yourself.
You must know yourself, know what you want, what you are worth, your strengths and weaknesses and, in this way, correct or develop.
Regardless of what others say, there will always be someone for whom what you are about to start doing is a mistake.
The important thing is that you attend to the behaviors in you that tell you that you are being overly affected by the opinion of others.
Thus, if you have a high sensitivity, a high fear of rejection and anxiety to show your ideas to other people, it is very likely that you should seek help to free yourself from the opinion of others.
It is necessary to work on our self-esteem, accepting our deficiencies and, of course, working on them.
Oh, and of course, learn to impose limits and to express our opinions, many times, without giving so many explanations.
An interactive activity: Are we causing anxiety in others with our opinions?
We know, that we must strengthen our inner self in order to be able to free ourselves, a little, from the opinion of others.
However:
How do we free ourselves from giving excessive opinions?
Are we being empathetic, polite and respectful of others when we give our opinions?
Let's look at these three cases -you can talk about all three or just one of them- and leave us your opinion in the comments, or how, if you should give it, would be your opinion in these situations:
Lucia is a single mother and has a 15-year-old daughter, who has told her that she is in love with a 21-year-old boy. Lucía has decided to let the young man visit her daughter, because it is preferable for them to see each other at home and to avoid seeing each other on the street.
José Luis did not want to give money to a man in a street situation, because he looked drunk and, therefore, it was very likely that he would buy liquor with that money.
Julia, who is about to finish high school, is torn between studying law or philosophy.
We are constantly voicing our opinion; it is necessary, we live in society and we interact with each other.
But how far can our levels of meddling go?
How far can we offend or not?
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Esto sucede mucho con nuestro hijo, cuando le recordamos que no haga tal cosa y resulta que no presta atención y lo hace y después tienen problemas. Es necesario que cada quien viva su experiencia para que en base a eso pueda reflexionar y madurar también, saludos amigo.
Eso es muy lógico y correcto.
Aprendemos mucho de las experiencias directas, más que de las indirectas.
Gracias, amigo @cetb2008
Creo que de todas el más complicado es el primer caso.
En el segundo puedes no darle dinero, o, darle el dinero. De todas formas si le das dinero tu lo estas haciendo para ayudarle, lo que haga con el son sus decisiones las cuales tendrán consecuencias. Puede que casualmente no compre alcohol, sino pan para comer, o le lleve algo a sus hijos.
A la chica del tercer caso yo le diría "estudia las dos". ¿Por qué quedarse con la duda de que pasaría? Tenemos toda una vida, podemos estudiar dos carreras al mismo tiempo, o una primero, y luego la otra.
Pero, en el primer caso ni yo se que hacer si me tocará. Un chico mayor por lo general no busca a niñas como ella para cosas buenas, lo cual puede ser muy malo para ella haciéndola crecer rápido para su edad. Creo que esperaría a ser madre para saber que hacer, o, solo esperar a que algo así no pase.
Muy buenas reflexiones.
Yo, en caso de la madre tomaría cartas en el asunto, impondría límites.
¿Ves como cambian las opiniones y las acciones según los otros?
Muchas gracias, @zulfrontado
Siempre es un gusto leerte.
Es un tema, amigo @emiliorios, que da mucho que decir. Vivimos en sociedad y siempre, de una u otra manera, lo que alguien dice puede afectarnos, pero también puede pasar que nosotros (queriendo o sin querer) seamos ese "otro" que dice y que podamos afectar a alguien con nuestras palabras.
Estaré preparando mi participación par acompartir mi opinión sobre este tema tan necesario de ser abordado.
Gracias, amigo @apineda
Dejar de dar nuestra opinión parece imposible es algo que está en nuestra esencia como seres humanos, pero las opiniones pueden ser armas de doble filo en vez de ayudar podemos destruir, sueños, ilusiones o ser una piedra de tranca en el camino de alguien, lo más factible es no meterse en la vida de los demás a menos que nos lo pidan, hacerlo de una manera empática, objetiva, correcta sin reacciones impulsivas, lo mejor es como dice el proverbio "no meter las narices en dónde no nos corresponde", pero no vamos a dejar de meternos está en nuestra naturaleza.
Con relación a José Luis que no quiso ayudar a un señor en situación de calle porque creyó que era un borracho.
Aquí dando mi humilde opinión pienso que José Luis actuó de mala manera algo impulsivo y egoísta, un señor en situación de calle que aspecto tendría? Tal vez el mismo aspecto de un borracho. Cómo sabe si ese señor tenía hambre y el pudo actuar con generosidad, empatía y darle un poco de caridad .
No estoy juzgado el proceder de José Luis, sólo hablo de lo que pudo haber sido, no estoy segura de ser sabía mi opinión, cada quien tiene su criterio y su punto de vista, miramos de forma diferente.
Saludos y bendiciones.
Yo tampoco he dado muchos detalles, por lo mismo, porque es un experimento, pero de corazón, opino igual que tú, @mariperez316
Muchas gracias, mi apreciada amiga.
Agradecida @emiliorios🤗
@emiliorios, you're rewarding 14 replies from this discussion thread.
Thanks a lot, @commentrewarder team
Casualmente hoy comentaba eso con mi mamá y llegué a la conclusión que la única responsabilidad de como nos sentimos con los demás es nuestra.
Lo cual es muy cierto.
Pero, aceptar las propias responsabilidades de los actos, parece ser muy duro en el ser humano de hoy en día.
Gracias, @getheenspring
¡Saludos!
Al final, amigo, en los tres casos creo que hay un común denominador y es que los tres casos tomaron decisiones en base a las expectativas de otros y no en las propias. No es fácil tomar ese tipo de decisiones está en el fondo un compromiso que uno puede auto imponerse y que atentan contra lo que uno verdaderamente desea. Entrometiendome, les diría: sigue a tu corazón. Creo q en alguna película escuché está frase y es muy válida. Un abrazo amigo
¡Excelente!
Gracias, amigo @jrobe
Un abrazo enorme.
Creo que, en ocasiones, la gente que quiere darnos consejos es porque creen que su idea es lo mejor para nosotros. Y eso es algo que uno también hace, en ocasiones sucede que lo que parece un buen consejo, no necesariamente lo es.
También hay casos en que la gente (o uno mismo) proyecta en los demás los deseos que no se han cumplido, y eso crea una especie de grillete que puede afectar a la persona. Recuerdo un caso de un amigo de la universidad que se cambió de carrera, y eso causó peleas con sus familiares, hasta que él explicó que estudiar esa carrera era el sueño de su padre, no el sueño de él. En verdad su papá creía que era la carrera que le podría dar un mejor futuro, pero no había caído en cuanta que había encadenado a su hijo al sueño que no pudo cumplir. Fue bueno que lograran hablarlo y crecieran juntos para superar eso. No siempre el final de estas situaciones as así de bueno.
Esto de las carreras universitarias o, para ser más específico, de elegir una profesión o lo que haré para producir en mi vida, aún está plagado de tintes culturales.
Es por eso que nos asombra que un "influencer" llame carrera a lo que hace, y lo es.
Gracias por siempre estar, @pedrobrito2004
@commentrewarder
Creo que el peso que puedan tener las opiniones sobre uno mismo, ese peso se lo da uno mismo, creo que la madurez de la persona puede cambiar eso, y querer complacer a tus familiares para cumplir los sueños de esos familiares, te hace una persona que no piensa en sí mismo.
Claro, esta es mi opinión que posiblemente puede ser muy individualista.
Es una buena perspectiva, @lanzjoseg
Saludos.
Tocaste un punto interesante para debatir, una cosa es dar una opinión y otra una crítica destructiva o una imposición, como en los ejemplos que mencionaste sobre las personas que terminaron viviendo en función de lo que los demás les decían, sobre todo, sus familiares cercanos. Es muy común que existan padres extremadamente sobreprotectores y controladores que no les permiten a sus hijos aprender a elegir por ellos mismos, tengo el caso de una amiga cercana, se acostumbró a que los padres siempre decidieran por ella y la sometieran. El resultado es que no sabe qué hacer con su vida ni que le gusta, siente un vacío y, demás, todavía le comenta todo lo que hace a los papás, es incapaz de tomar una decisión por sí misma, les sigue pidiendo su opinión y permiso a pesar de tener más de 30 años 😅. Podrá parecer una tontería, pero mira las consecuencias que trae en la adultez 😱. No tuvieron que maltratarla físicamente para generarle un problema psicológico 😅. Actualmente, está en terapia tratando de entender de dónde viene ese vacío, el exceso de perfeccionismo y esa disconformidad con la vida. Por eso hay que dejar que los niños se equivoquen y aprendan por ellos mismos, no se puede estar encima de manera tan enfermiza, los padres que asfixian a sus hijos no los dejan crecer nunca y tampoco tomar el rumbo que quieren, ese conocer su verdadero propósito de vida, aunque suene cliché. Saludos, @emiliorios 🤗, estos temas están geniales.
Sí, @vezo, geniales como tu respuesta y comentario.
Me encantó.
Parece mentira que hoy en día, aún con la tecnología que conecta tantas maneras de vivir a la nuestra, exista esto aún con consecuencias tan desastrosas para un ser humano.
Gracias por la reflexión.
Lucia, Jose Luis y Julia, tres personas distintas con su propia visión de las situaciones que viven y me viene a la mente que cada quien conoce la gotera que vive en su casa, cada quien tiene sus propias luchas y lo que nos puede parecer malo en una persona quizás, se deba a un sin fin de causas. También se me ocurre decir que cada cabeza es un mundo. Entonces mi visión de cada situación puede ser distinta a la de ellos más eso no significa que yo tenga la razón y ellos estén equivocados.
En todo caso, si alguien solicita opinión hay que pensar bien antes de hablar para sumar y no restar al punto de hacer mucho daño. Gracias amigo @emiliorios por este tema.
Gracias, @parauri
La idea es verificar hasta dónde puede llegar a ser una intromisión mi opinión.
Y es que nadie puede vivir la vida de nadie, pero hay que reconocer que la experiencia indirecta de otros puede ayudarnos a generar herrameintas de vida.
Muchas gracias por tu comentario, mi apreciada amiga.
De nada amigo, justo estoy por Hive y veo tu respuesta. Si, es posible que la experiencia de otros sea una ayuda indirecta, para quienes lo acepten. En realidad tenia mucho que aportar cuando leí tu publicación pero no quise extenderme tanto en el comentario porque desde la introducción me inspiraste para presentar una publicación, ahora vamos a ver para cuando 😉 Ya sabes que me tardo últimamente mucho para publicar.
Un abrazo amigo. Bendiciones 🙏🏼
Nada más incómodo que dar nuestra opinión cuando no nos la están pidiendo y de igual manera a la inversa, me parece irrespetuoso, y sé que incomoda bastante. Con los hijos solemos caer en eso, el miedo nos lleva a suponer, adelantarnos o formarnos expectativas y ahí metemos la paleta en el guiso que no es nuestro.
Ahora, voy a suponer que Lucía me pidió el consejo. Yo le diría que estoy de acuerdo, es preferible acercar a esta persona y ver quién es y cómo se comporta sin ser muy invasivos, sabemos por ley de vida que cuando se les lleva la contraria a los hijos, ellos lo hacen peor, o hacen las cosas por rebeldía o por contradecir. En algunas situaciones se dan cuenta de que no están preparados para dar el paso y lo dejan hasta ahí o van consolidando las cosas paso a paso. Hay parejas bien llevadas con muchos años de diferencia.
Saludos cordiales.
Muchas gracias, @charjaim
Imagínate, yo ni siquiera le hubiese permitido tener novio, pero, son otros tiempos.
¡Cómo me doy cuenta de que me gusta el control!
¿Estamos siendo empáticos, educados y respetuosos con los demás al expresar nuestras opiniones?
Recuerdo que antes de ingresar a la universidad en la carrera de educación, muchos amigos pensaban que yo no tenía las condiciones económicas para cursar estudios superiores, que mi padre era un hombre humilde y además se había enfermado y no podía seguir trabajando.
La opinión de muchos e incluso de mis familiares era que debía abandonar mis aspiraciones de estudiar en la universidad para buscar un trabajo y ayudar a mi padre enfermo y a mi familia.
Yo opté por ambas cosas, pero no tomé en cuenta la opinión de abandonar mis aspiraciones universitarias. Yo estaba confiado en que podía trabajar durante el día y estudiar por la tarde en la universidad, aunque era duro y difícil, lo logré.
Cuando algunos vieron que había tenido éxito, empezaron a aparecer amigos que querían saber cómo había logrado el éxito y si ellos también podían intentarlo.
Le di mi opinión a muchas personas sobre enfrentar retos y que podían ser personas exitosas si creían que podían dar lo mejor de sí en cada reto.
Di mi opinión respetando las condiciones de cada persona y solo compartí aquellas cosas difíciles que pude superar, sin tener que generar ansiedad y miedo en quienes aspiraban a tener mejores condiciones sociales.
El respeto es fundamental y dejar que las personas elijan lo que podemos decir sobre algún aspecto de sus vidas.
Feliz y bendecido día. Éxitos.
Bien, esas si son opiniones que se respetan, las de crecimiento.
Y usted lo logró, amigo @elpastor
Gracias por pasar y estar cerca siempre, amigo.
Saludos mi hermano. Dios bendiga más tu vida y familia. Éxito.
Las opiniones cumplen un papel fundamental en el desarrollo de la sociedad, y a nivel personal nos brindan la oportunidad de poder sumar nuestro punto de vista sobre algo determinado. Claro, del otro lado está el momento cuando las opiniones de otras personas están dirigidas hacia algo relacionado con nosotros,lo cual también es de vital consideración pues su efecto puede tener un gran peso en nuestras decisiones.
Además de la convicción y determinación, cada uno de nosotros debe tener la madurez necesaria para opinar y también asimilar lo que se diga de nosotros, sin dejar que nuestra vida se maneje en base a lo que piensa o dice alguien más, y siendo comprensivos con los consejos y las sugerencias que se nos puedan dar.
De los casos que mencionas, el último suele ser bastante común,un campo en el que es más fácil opinar que vivirlo, ya que se trata de algo que puede determinar muchas cosas importantes en tu vida. La tendencia confirma el grado de dificultad, por lo tanto no está de más ser considerables a la hora de decir o escuchar algo que afecte de forma significativa el proceso que lleva a tomar una buena decisión. 🙂
Opinar muchas veces ayuda, a mi manera de verlo, pero hay que saber dar las sugerencias o las razones por las cuales es así nuestra opinión.
Coincido contigo, @cajiro en que hay que ser considerados.
Gracias por tu comentario, amigo.
¿Estamos siendo empáticos, educados y respetuosos con los otros, a la hora de emitir nuestras opiniones?
Es que una cosa es una opinión solicitada y otra muy distinta cuando la gente es metiche, que te den su "opinión" sin pedirla, ellos se sienten felices como que hicieron la labor del día, con una autoridad casi suprema de que tenían que decirte tal cosa porque sí, desde pequeña me enseñaron a ignorar tal como dice aquél dicho: A palabras necias oídos sordos... así que cuando suceden este tipo de circunstancias les digo: ¡Gracias! sigo con mi vida y ya, a menos que quizás haya dicho algo que pudo haber resonado en mi y me quedo con eso para buscar de mejorar.
Ahora si nos ponemos del otro lado, que seamos nosotros quienes damos la opinión, es un tema delicado también, he aprendido con el tiempo que la prudencia es el mejor consejero si me tocaran estos tres casos sería algo así:
Lucía es madre soltera y tiene una hija de 15 años, quien le ha dicho que está enamorada de un chico de 21 años. Lucía ha decidido dejar que el joven visite a su hija, porque es preferible que se vean en su casa y evitar que lo hagan en la calle.
R= Imagino que Lucía es mi vecina, pienso que está bien, no le digo nada hasta que ella me cuente por su cuenta y si me pide opinión le digo que está bien, que ella como madre sabrá darle los consejos apropiados para su hija.
Julia, quien está a punto de culminar sus estudios de secundaria, tiene una gran indecisión entre estudiar derecho o filosofía.
R= ya he conocido a varias Julias con una situación similar y le diría que disfrute su juventud y que estudie la que mas desee primero que luego podrá sacar la segunda carrera que quiera y seguirá especializándose en ambas, el conocimiento es infinito, nunca se pierde y que el tiempo le dará razón.
Bueno, te soy sincero: ¡Esperaba tu comentario!
Gracias, @yenmendt
Sí, las opiniones tienen peso dependiendo de quién provengan.
Me gustó la sugerencia a Julia.
Un abrazo virtual enorme, amiga.
@tipu curate 8
Sorry, please curate posts not older than 1 day.
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Gracias, @miriannalis
Besos.