Nuestros juicios configuran muchos aspectos de nuestras vidas. Son patrones esenciales que moldean nuestra percepción de la realidad, facilitando la comprensión del mundo que nos rodea. Funcionan como materia prima para la construcción de nuestros pensamientos.
Sin embargo, muchas veces estos juicios no son un reflejo fiel de quienes somos, pues se ofuscan por la bruma de nuestras emociones y se erigen como verdades absolutas. Pero esta falsa seguridad se desvanece ante una realidad mucho más compleja que la limitada visión trazada por nuestros juicios preconcebidos.
Nuestros juicios, aunque útiles, no siempre son precisos.
English version
Our judgments shape many aspects of our lives. They are essential patterns that shape our perception of reality, facilitating our understanding of the world around us. They function as raw material for the construction of our thoughts.
However, many times these judgments are not a true reflection of who we are, as they are obfuscated by the haze of our emotions and set themselves up as absolute truths. But this false security vanishes in the face of a much more complex reality than the limited vision traced by our preconceived judgments.
Our judgments, while useful, are not always accurate.
La realidad, en toda su complejidad, nos confronte y nos hace sentir vulnerables, obligándonos a cuestionar la validez de nuestros juicios. Es en este proceso de introspección donde podemos comenzar a desdibujar los velos que estos imponen y acceder a una comprensión más profunda de nosotros mismos y del mundo que nos rodea.
Es en este punto donde la fragilidad de nuestros juicios se hace patente. La realidad, en su incesante fluir, nos confronta con su vastedad, exponiendo la fragilidad de nuestras creencias. Nos encontramos vulnerables ante una verdad que desborda los confines de nuestros mapas mentales.
Creemos poseer una imagen nítida de nosotros mismos, cuando en realidad habitamos una dimensión finita, trazada por los límites de nuestros propios juicios.
English version
Reality, in all its complexity, confronts us and makes us feel vulnerable, forcing us to question the validity of our judgments. It is in this process of introspection that we can begin to blur the veils they impose and access a deeper understanding of ourselves and the world around us.
It is at this point that the fragility of our judgments becomes apparent. Reality, in its incessant flow, confronts us with its vastness, exposing the fragility of our beliefs. We find ourselves vulnerable to a truth that overflows the confines of our mental maps.
We believe we possess a clear image of ourselves, when in reality we inhabit a finite dimension, traced by the limits of our own judgments.
Comprender y empatizar con nuestro propio ser se convierte así en una actividad tan ardua y agotadora que puede tornarse, en un instante, repulsiva. Ante tal esfuerzo, preferimos acurrucarnos en la comodidad de una verdad acomodaticia, una ilusión que simula la compañía de nuestra propia sombra.
Los juicios son como la piel de un globo, una membrana elástica que va expandiéndose con nuestras experiencias a lo largo de los años. Sin embargo, como cualquier globo, encuentra su límite. Un encuentro con la realidad, un hecho inesperado que revela una nueva perspectiva, puede hacer que este globo estalle. Este estallido nos obliga a enfrentarnos a una verdad que no habíamos percibido antes, una verdad que ahora se integra en nuestro ser, a pesar de nuestras imperfecciones y sesgados juicios.
Es en ese instante de ruptura cuando podemos encontrarnos a nosotros mismos, quizás por primera vez, con mayor atención y sensibilidad. Sentimos, en lo más profundo de nuestro ser, una raíz que pulsa con fuerza, una vibración innegable que resuena en los recovecos de nuestra alma.
Un pulso que solo puede ser descubierta al despojarnos de nuestros sesgados juicios y abrazar la vulnerabilidad de la autoexploración.
English version
Understanding and empathizing with our own being thus becomes such an arduous and exhausting activity that it can become, in an instant, repulsive. Faced with such an effort, we prefer to curl up in the comfort of an accommodating truth, an illusion that simulates the company of our own shadow.
Judgments are like the skin of a balloon, an elastic membrane that expands with our experiences over the years. However, like any balloon, it finds its limit. An encounter with reality, an unexpected event that reveals a new perspective, can cause this balloon to burst. This bursting forces us to confront a truth that we had not perceived before, a truth that is now integrated into our being, despite our imperfections and biased judgments.
It is in that instant of rupture that we are able to meet ourselves, perhaps for the first time, with greater attention and sensitivity. We feel, in the depths of our being, a root that pulses with strength, an undeniable vibration that resonates in the recesses of our soul.
A pulse that can only be discovered by shedding our biased judgments and embracing the vulnerability of self-exploration.
La ruptura de nuestros juicios preconcebidos nos revela la existencia de nuestra noción fragmentada del yo. Es como desvelar un mapa antiguo, oculto entre pliegues del tiempo. Es la revelación de una parte desconocida de nuestra identidad que ha crecido en silencio, como un río subterráneo que finalmente desborda, revelando su caudal. Este descubrimiento, aunque pueda ser agridulce o incluso difícil de aceptar, encierra un potencial transformador para nuestra propia identidad.
He experimentado esta sensación de desfragmentación en múltiples ocasiones. A veces, como una verdad agridulce que deja un sabor melancólico en el alma. En otras, como una realidad difícil de digerir, pero que esconde aspectos que no había visualizado con suficiente atención.
Quiero agradecer profundamente @damarysvibra por su iniciativa: Interpretándome a partir del otro. La cual nos inspira a emprender una vez más, un viaje introspectivo hacia nuestra nuestro ser en busca de resultados positivos que impulsen nuestro desarrollo personal.
Nuestro crecimiento comienza donde nuestros certezas se derrumban.
English version
The rupture of our preconceived judgments reveals to us the existence of our fragmented notion of self. It is like unveiling an ancient map, hidden in the folds of time. It is the revelation of an unknown part of our identity that has grown in silence, like a subway river that finally overflows, revealing its flow. This discovery, although it may be bittersweet or even difficult to accept, holds a transformative potential for our own identity.
I have experienced this sense of defragmentation on multiple occasions. Sometimes as a bittersweet truth that leaves a melancholic taste in the soul. At other times, as a reality that is difficult to digest, but which hides aspects that I had not visualized with sufficient attention.
I want to deeply thank @damarysvibra for her initiative: Interpreting myself from the other. Which inspires us to embark once again on an introspective journey into our being in search of positive results that drive our personal development.
Our growth begins where our certainties collapse.
En mi juventud, la crítica externa me afectaba profundamente. La asimilaba de forma ingenua, aferrándome a mi egoísmo y negándome a prestar atención a las perspectivas de los demás. Craso error, pues este egoísmo solo servía para opacar mis propios defectos. Adopté una postura repelente, burlesca y sarcástica, impulsado por la observación de las acciones ajenas. Me resultaba incomprensible recibir un trato hostil y cínico en situaciones donde la interacción era inevitable. Me preguntaba: "¿Para qué empatizar, si el resultado habitual es el escarnio y la burla?".
Esta incomprensión me llevó a adoptar una actitud defensiva permanente, incapaz de distinguir entre un trato genuino y uno hipócrita. Esta misma actitud hirió a muchas personas que me expresaban su cariño, pero mi desconfianza me impedía aceptarlo. El maltrato recibido por parte de otros se convertía en un defecto que me alejaba de la experiencia humana de la confianza y del cariño genuino. Interpretaba sus gestos como simples cortesías o como obligaciones sociales, sin permitir que mi mundo interior las aceptara de forma genuina.
La desconfianza se convirtió en un cáncer que minaba mis relaciones con amigos y familiares.
English version
In my youth, external criticism affected me deeply. I assimilated it naively, clinging to my selfishness and refusing to pay attention to the perspectives of others. This selfishness only served to overshadow my own shortcomings. I adopted a repellent, mocking and sarcastic posture, driven by the observation of others' actions. I found it incomprehensible to receive hostile and cynical treatment in situations where interaction was inevitable. I asked myself, "Why empathize, if the usual result is mockery and derision?"
This incomprehension led me to adopt a permanent defensive attitude, unable to distinguish between genuine and hypocritical treatment. This same attitude hurt many people who expressed their affection for me, but my distrust prevented me from accepting it. The mistreatment received from others became a defect that distanced me from the human experience of trust and genuine affection. I interpreted their gestures as simple courtesies or as social obligations, without allowing my inner world to accept them in a genuine way.
Mistrust became a cancer that undermined my relationships with friends and family.
A medida que crecía, las heridas de aquellos tratos hostiles empezaron a colmar mis emociones. Busqué refugio en la soledad, en la autosuficiencia, creyendo que así evitaría el dolor de la traición y el desengaño. Sin embargo, esta actitud se desmoronó inevitablemente. La vida, en su complejidad, me obligó a aceptar la ayuda de los demás, a pesar del miedo a la vulnerabilidad. Y, por fortuna, no todos los encuentros fueron negativos.
Descubrí que el mundo está poblado de individuos con sus propias luces y sombras, que no todos son villanos predeterminados por sus pensamientos y creencias. Comprendí que también existen personas que luchan por superar sus defectos, por ser mejores versiones de sí mismas.
Asumí que la lealtad absoluta es una utopía, que las personas, en su búsqueda de la felicidad y el bienestar, pueden tomar decisiones que no siempre se alinean con nuestras expectativas.
El amor y el aprecio que sentimos por alguien no necesariamente garantizan su permanencia en nuestras vidas.
English version
As I grew older, the wounds of those hostile dealings began to fill my emotions. I sought refuge in solitude, in self-sufficiency, believing that I would thus avoid the pain of betrayal and disappointment. However, this attitude inevitably crumbled. Life, in its complexity, forced me to accept the help of others, despite the fear of vulnerability. And, fortunately, not all encounters were negative.
I discovered that the world is populated by individuals with their own lights and shadows, that not everyone is a villain predetermined by their thoughts and beliefs. I understood that there are also people who struggle to overcome their flaws, to be better versions of themselves.
I assumed that absolute loyalty is a utopia, that people, in their search for happiness and well-being, can make decisions that do not always align with our expectations.
The love and appreciation we feel for someone does not necessarily guarantee their permanence in our lives.
Habrá momentos en los que personas se irán de nuestras vidas, pero también estarán aquellos que permanecerán presentes. Y en un abrir y cerrar de ojos, podemos anhelar su compañía mientras aprendemos a valernos de nuestra propia fortaleza.
En este mundo irónico, donde alguna vez me resultó tan difícil diferenciar un trato hipócrita de uno genuino, ahora observo todo esto como una parte natural del ciclo de la vida, es un mosaico de experiencias, algunas dolorosas, otras llenas de luz que he aprendido aceptarlas con madurez y comprensión.
Las relaciones humanas son un constante tanteo, un equilibrio frágil entre la compañía y la soledad.
English version
As I reflected on my brief history, two crucial questions came to mind: To what extent are our ideas about ourselves mature enough to delineate the best path for our lives? And conversely, how do we find the balance between taking external perspectives into account without diminishing our essence?
If you have already found your answers and your current life does not match them, a reflective process has been born in you. An imaginary timeline forks in the deepest recesses of your being, throbbing with the yearning to change some aspect of your present.
It can be very hard to put your trust in others, especially when you don't know them well. Yet it has been my experience that most people are good people, despite the trepidation we might feel. Sadly those who aren't so good leave bigger marks on us than those who are, which is why they tend to impact us more.
Congratulations @finec! You have completed the following achievement on the Hive blockchain And have been rewarded with New badge(s)
Your next target is to reach 60 posts.
You can view your badges on your board and compare yourself to others in the Ranking
If you no longer want to receive notifications, reply to this comment with the word
STOP
Check out our last posts: