Personalmente, me ha gustado el estilo utilizado para transmitir, de forma concisa, la importancia del perdón y el amor propio. Un aspecto singular que aprecié fue el tránsito por las diferentes etapas de la vida, desde la niñez hasta la vejez. La niñez se simboliza metafóricamente como un proceso de "aprendizaje y autodescubrimiento", pues, de niños, aprendemos y nos descubrimos constantemente.
La representación de la niñez como una inherencia permanente en nuestro desarrollo existencial me parece un recurso literario adecuado para abordar las ideas subyacentes de su escrito, ya que no se limita a una etapa específica. Si fuese un titulo: La atemporalidad de la niñez.
Gracias. La niñez va a ser esa etapa de la vida presente siempre aunque se tengan cien años.
Veo la vida como un camino en el cual nos vamos haciendo y reconstruyendo, mientras le pasamos la mano con compasión a esa niña interior.
Me encantó tu comentario.