Pues he asistido a unos cuantos velorios por familiares que desafortunadamente se han ido de este mundo terrenal y siempre se ha mantenido un buen humor pese a las circunstancias, contando anécdotas de nuestros seres queridos que ya no están, recordando viejos momentos... creo que saber mantener esos recuerdos como lo que fueron, momentos buenos en donde nos conectamos con la familia, es necesario para mantener vivo nuestro espíritu.
Muchas gracias por compartir esas vivencias y por haberte tomado un tiempo para pasarte por acá a leer mi publicación.