Los caminos de la vida a veces son extraños, pero fuiste bendecida al final.
Llegar en el momento justo o recibir ayuda en el momento más necesario, más que coincidencias, son pequeños milagros.
Recuerdo una vez que no teníamos nada para comer y uno de nuestros amigos sin saber de nuestra necesidad llegó con un pollo de regalo. El trabajaba descargando un camión y a veces le pagaban con mercancía y ese día sin saber de nuestra necesidad decidió compartirlo con nuestra familia.
Ese si que fue un milagro amiga, de esos tengo gratas experiencias que al recordarlas se.me.pone el corazón chiquito, gracias por compartir tu experiencia conmigo, y por leer y comentar 🥰🥰 feliz noche