Eso de respetar nuestros propios ritmos es muy importante, no podemos dejar que nos imponga una pauta en nuestros procesos internos o tratar de acelerarlos, así que aplaudo que vayas a tu ritmo y reconozcas cada logro en tus avances por más pequeños que parezcan.
Si me permites sugerir una estrategia, te diría que juegues a ser "detective" de tu mente, procura despertar tu atención para que vayas cazando cuando surgen esos pensamientos negativos y puedas determinar ¿Cuándo surgen? ¿Siempre ocurren en las mismas circunstancias? ¿Varía algo? ¿Qué tan frecuentes son? ¿Se presentan en todas las áreas o solo en unas en específico? ¿Tiene relación con algún patrón que puedas identificar (Ejem: alguna creencia familiar)?
De este modo te será más fácil soltarlos porque sacas del inconsciente a la luz esos pensamientos que emergen sin darnos cuenta, y al hacer conciencia sobre ellos puedes tomar verdaderamente el control.
Gracias por participar en la iniciativa y aportarnos tu mirada...
Hola.
Disfruto el ritmo en mis procesos, me encanta ir reconociendo mis pequeños pasos para así motivarme un poco más cada día. No me gustan los cambios bruscos, siento que esos cambios tan rápidos al final te hacen volver a lo mismo.
Mi familia es muy supersticiosa quizás eso ha llevado a que viva con esas conjeturas y en algún que otro momento lo exprese como pesimismo. No se si tenga mucha relación, quizás.
Practicaré el juego, veremos qué respuestas saco y más adelante compartiré con ustedes mi experiencia en esa búsqueda.
Un abrazo