En estos días, me he ocupado extensamente en verme a mí mismo.
Conocerse a uno mismo puede ser un proceso agridulce. Parece mentira, ¿no? estamos siempre con nosotros mismos y sin embargo mirar hacia adentro siempre trae algo nuevo. Algo que incluso nisiquiera podemos nombrar, pero que sentimos que está allí.
Verás, estaba meditando para poder procesar las emociones que sentía me estaban haciendo peso adentro. Se parece a cuando éramos más pequeños y revisamos nuestra mochila después de todo el periodo escolar para limpiarla, así que vamos sacando los cuadernos pero, conseguimos también otras cosas que habíamos olvidado durante mucho tiempo. A veces encontramos basura del saca puntas, borradores diminutos que se mezclaron entre todas las cosas, pequeñas notas secretas que nos pasábamos entre compañeros de clase. Cosas así. A veces también nos conseguimos con cosas que no recordamos de donde vienen. Puede que incluso alguien más las haya puesto allí.
Hay emociones que cuando las sientes durante suficiente tiempo se vuelven tan normales que las ignoramos... como las puntas de nuestras narices. Solo las diferenciaríamos si estuvieramos buscándolas específicamente. Yo encontré la vergüenza.
Verguenza
En un post anterior hablé sobre esta emoción y su función primaria para nosotros los seres humanos. Me gustaría aclarar, para evitar el antagonismo a las emociones, que todas tienen un propósito útil hasta que se hacen muy fuertes, traduciéndose en problemas para nosotros.
Un toque de indignación, un toque de incomodidad, un toque de vergüenza, nos ayudan a tomar desiciones. A señalarnos cuando alguien ha roto nuestra confianza o ha sobrepasado nuestros límites. Si todo nos diera igual seríamos como maniquies, pero no lo somos. El problema está cuando tenemos la sensación de que no podemos hacer nada al respecto.
El mundo en que vivimos
Si entras a cualquier red social te darás cuenta que la juventud de hoy sufre de vergüenza crónica. El motivo es que recien salimos de una época de prosperidad donde era muy fácil tener lo necesario para vivir e incluso un lugar donde vivir. Nuestros padres la vivieron y tuvieron que sufrir, como nosotros, como se les volcaba en la cara de golpe. Lo que me he dado cuenta, sin embargo, es que la gran mayoría de las personas ignora por qué ocurrió. Cuando no sabemos por qué pasan las cosas, tendemos a señalar a la primera persona que tenemos delante. Es así como una generación culpa a la siguiente.
"Si lo intento y fallo... estaré más avergonzado que antes"
Así que vivimos en un mundo más difícil. Eso significa que es más fácil equivocarse y obtener resultados toma más tiempo. Encima, la verguenza engendra a su antagonista: El orgullo. Las personas más avergonzadas son aquellas con sueños de grandeza, que muchas veces deriva en el rencor, ¿no es así?
Observa esto: Hoy día, tener una casa propia un sueño para la mayoría. Pero si vemos la cultura actual, lo que definimos como éxito es eso, tener una casa propia, auto y familia. Lo que se definía como éxito hace 50 años.
Eso nos dice que en un tiempo más difícil, donde alcanzar ese mínimo de "auto aceptación" es más duro y encima ganas menos, tienes que optar por alcanzar aquello que era la norma.
Me gustaría ahondar un poco más.
¿Recuerdas que te comentaba que la verguenza engendra a su antagonista, el orgullo?
Pues bien, mientras más avergonzado te sientas, más consuelo obtendrás al ver películas de superhéroes, de personas que de repente obtienen lo que quieren, de aquellos que encarnan la perfección. También te dará consuelo, así sea secreto, de aquellos anti héroes también porque la verdad es que tiene más sentido impartir justicia sin tanta gentileza. Probablemente no nos quede mucho de ella adentro.
Reflexionemos
¿Quién pone las reglas del juego?
Querido lector, si como yo has estado arrastrando la verguenza durante años, porque alguien te hizo sentir inferior por mucho tiempo, porque en tu familia valoran solo cosas en la que no eres bueno, o porque simplemente el mundo indirectamente hace lo mismo, te invito a preguntarte:
¿Mereces sentirte avergonzado?
Una parte de ti dirá que sí porque no rendiste de acuerdo a las expectativas. Porque hiciste algo de lo que te arrepientes. Si es así, me gustaría recordarte que la verguenza en realidad tiene la función de ayudarte a mejorar, no paralizarte. Ya sea porque le hiciste daño a alguien incluso, ¿qué justicia le harás al empeorar tu propio modo de ser al llenarte de rencor y frustración?
Conclusión
Viendo el estado del mundo reflejado en mí mismo, como ser humano que es testigo y participante de la historia presente, sentí la necesidad de recordar y de recordarte que somos seres humanos. Los medios te dirán que para tener una vida emocionante necesitas de un montón de cosas. Así es el marketing. Pero cuando todo el mundo se cree una mentira, se vuelve verdad, ¿no es cierto?
Negar la verdad o ir en contra de ella siempre duele porque chocamos constantemente de cara con ella, así que si te sientes tan avergonzado que no tienes ganas de vivir es porque algo hemos interpretado mal a lo largo del camino.
Eres suficiente: ¿Por qué? Porque sigues vivo. Te creería si el sol se negara todos los días a no darte luz a ti, pero te sigue dando tanta que incluso te podría matar hoy día. Porque puedes respirar. Porque puedes intentar de nuevo. Pues bien, a lo mejor te hayas rendido contigo mismo pero la naturaleza no parece compartir la misma idea.
A veces ganas, a veces pierdes: Hoy volviste a tomar, volviste a drogarte o volviste a comer ese algo no tan saludable. El ser humano avanza en todas las cosas a través de prueba y error, pero con constancia. Te pides demasiado al demandarte la perfección. Alguien te dijo que eras inferior por cometer errores. Pues fíjate bien en esa persona: ¿Era perfecta como te exigía?
El ser humano ha creado una civilización. En muchas cosas hemos desarrollado nobleza, pero en otras aún tenemos mucho que aprender. Este post es para recordarnos que podemos elegir no participar en un juego macabro, aunque todo el mundo lo juegue. No te creas esa mentira aunque todo el mundo la repita, puede que tu vida dependa de ello.
¡Un saludo!
These days, I have been extensively engaged in seeing myself.
Getting to know yourself can be a bittersweet process. It seems incredible, doesn't it? We are always with ourselves and yet looking inward always brings something new. Something that we can't even name, but that we feel is there.
You see, I was meditating so I could process the emotions I felt were weighing me down inside. It's like when we were younger and we went through our backpack after the entire school period to clean it, so we take out the notebooks but we also get other things that we had forgotten for a long time. Sometimes we found trash from the pencil sharpener, tiny erasers that got mixed up in everything, little secret notes that we passed between classmates. Things like that. Sometimes we also get things that we don't remember where they come from. Maybe someone else even put them there.
There are emotions that when you feel them for long enough they become so normal that we ignore them... like the tips of our noses. We would only differentiate them if we were looking for them specifically. I found shame.
Shame
In a previous post I talked about this emotion and its primary function for us human beings. I would like to clarify, to avoid antagonism to emotions, that they all have a useful purpose until they become very strong, translating into problems for us.
A touch of indignation, a touch of discomfort, a touch of shame, help us make decisions. To point out when someone has broken our trust or crossed our limits. If everything didn't matter to us we would be like mannequins, but we are not. The problem is when we feel like we can't do anything about it.
The world in which we live
If you enter any social network you will realize that today's youth suffers like from chronic shame. The reason is that we have just come out of a time of prosperity where it was very easy to have what was necessary to live and even a place to live. Our parents lived through it and had to suffer, like us, as it suddenly came crashing down on them. What I have realized, however, is that the vast majority of people do not know why it happened. When we don't know why things happen, we tend to point to the first person in front of us. This is how one generation blames the next.
"If I try and fail... I will be more embarrassed than before"
So we live in a more difficult world. That means it's easier to make mistakes and getting results takes longer. Furthermore, shame engenders its antagonist: Pride. The most ashamed people are those with dreams of greatness, which often leads to resentment, right?
Observe this: Nowadays, having your own home is a dream for most. But if we look at today's culture, what we define as success is having your own house, car and family. What was defined as success 50 years ago.
That tells us that in a more difficult time, where reaching that minimum of "self-acceptance" is harder and you earn less, you have to choose to achieve what was the norm.
I would like to delve a little deeper.
Do you remember that I told you that shame breeds its antagonist, pride?
Well, the more embarrassed you feel, the more comfort you will get from watching movies about superheroes, about people who suddenly get what they want, about those who embody perfection. It will also give you comfort, even if it is secret, from those anti-heroes too because the truth is that it makes more sense to dispense justice without so much kindness. We probably don't have much of it left inside.
Let's reflect
Who sets the rules of the game?
Dear reader, if like me you have been carrying shame for years, because someone made you feel inferior for a long time, because your family only values things that you are not good at, or because the world simply indirectly does the same, I invite you to ask yourself:
Do you deserve to feel ashamed?
A part of you will say yes because you didn't perform up to expectations. Because you did something you regret. If so, I would like to remind you that shame actually has the function of helping you improve, not paralyzing you. Whether it's because you hurted someone, what justice will you do by worsening your own way of being by filling yourself with resentment and frustration?
Conclusion
Seeing the state of the world reflected in myself, as a human being who is a witness and participant in present history, I felt the need to remember and remind you that we are human beings. The media will tell you that to have an exciting life you need a lot of things. That's marketing. But when everyone believes a lie, it becomes the truth, right?
Denying the truth or going against it always hurts because we constantly collide face to face with it, so if you feel so ashamed that you have no desire to live it is because we have misinterpreted something along the way.
You are enough: Why? Because you're still alive. I would believe you if the sun refused to give you light every day, but it continues to give you so much that it could even kill you today.
Because you can breathe.
Because you can try again. Well, maybe you have given up on yourself but nature doesn't seem to share the same idea.
Sometimes you win, sometimes you lose: Today you drank again, took drugs again, or ate that not-so-healthy something again. Human beings advance in all things through trial and error, but with perseverance. You ask too much of yourself by demanding perfection. Someone told you that you were inferior for making mistakes. Well, take a good look at that person: was he perfect as he demanded?
Human beings have created a civilization. In many things we have developed nobility, but in others we still have a lot to learn. This post is to remind us that we can choose not to participate in a macabre game, even if everyone plays it. Don't believe that lie even if everyone repeats it, your life may depend on it.
All the best!
Así mismo es la la vergüenza de fracasar no sea impedimento para intentarlo 👏👏
Así como dices, amiga. Una especie de enorme sombra del ego envuelve a la sociedad actual, porque parece un problema bastante común hoy dia.
Buen post! Gracias por compartir!!!
Encantando de poder servirte ~
Great and well written post! Playing the game of the modern world with the so called rules set in place always seems to backfire at us because it's fundamentally not aligned with who we are as an individual. I thinking wanting more has become the norm so much so that people now believe that without having more they're not going to be happy or have a good and successful life.
Indeed. Deep shame makes you believe without beating yourself up you can't actually reach results. Lately, feeling deeply inside of myself I have noticed the diference.
The wall between us and what we want to do to improve is not made of stone, but some sort of very cold water. You can erode yourself by grabbing a hammer and strike the wall while getting inside it or you could just step inside. If you just let yourself feel the unconfortable cold you it will vanish in a while, most of it at least.
Another trick I use is saying "This is all there is", to let my mind know I won't budge from what I am doing until I finish it. That way it stops trying to distract me while I write. You know, these thoughts of "Let's check whatsapp real quick, let's watch facebook real quick, let's grab a soda real quick".
Right, I think you've said it quite well with the analogy of cold water, it puts you in a state where you're disconnected from what really matters and you try to come up with all sort of tricks to stay in that stage instead of knocking yourself out of it through admitting that this is all there is and you need to get it done and experience it right here, right now.
I think the modern world brings so much excuses for us to justify our lack of willpower with regards to our thoughts and emotions dictating the way we live our lives.