Dios siga bendiciendo a tu mamá, no se le notan los 83 años por ninguna parte y quien diría que sería ella la que los cuidaría a todos. Gracias también a Dios que pudieron superar la enfermedad en tu hogar. Realmente fueron tiempos difíciles, con muchos aprendizajes.
Saludos.
Honor a quien honor se merece, a Dios, si no hubiera Sido por El que sería de nosotros, solo Él tiene el control de nuestras vidas, mi mamá ese año tenía 83, actualmente tiene 86, agradecida amiga por leer mi post, bendiciones y saludos.