Agradezco cada una de sus palabras y estás historias de vida las cuento porque pueden ayudar a una persona y, al final, es mi objetivo esencial en este ecosistema.
En ese momento particular de mi vida mi madre fue mucho más que eso y puedo decir que salvó mi vida y ese momento que me dió la botella de ron, algo tan contrario para ella, más sus palabras fueron una excelente terapia.
Feliz semana.
Gracias reiteradas.
Salud y saludos.