Arreglo las cosas poco a poco, ahora voy por el proceso de las paredes.
En mi escritorio hice algo nuevo, algo que nunca pensé que haría: Colocar mariposas en la pared.
Antes no lo hubiera hecho, porque sería algo que no duraría mucho en la pared.
Estas mariposas las hice para la torta de cumpleaños de mi hermana, pero, como sabrás, algunos detalles, después quedan sin ninguna utilidad. Así que las mantuve en mi escritorio hasta decidir qué hacer con ellas.
Hasta hace unos días.
Limpie, y las vi nuevamente, y me dije "¿Y si las pego a la pared con silicon?" Coloqué los libros del otro lado, y me dispuse a pegarlas. También coloqué allí mi florerito improvisado con todas las flores que me ha regalado mamá. ¡Qué bonito se ve ahora!
También ayer pinté parte de la cocina, y mamá colocó en la pared una figura que se ve preciosa.
Detalles como este le dan ese calor de hogar, además de inspirarte. De la misma manera limpiamos toda la casa.
Es algo curioso. Porque por lo general, limpiar me hace pensar para tomar buenas decisiones, o para drenar cuando me siento muy molesta. Mantiene mi mente en calma, así como también dejo mi casa impecable.
Diría que es un dos por uno. Aunque no me creerías si te cuento que antes detestaba limpiar, hasta que empecé a tomarle gusto limpiando a diario.
Desde allí lo hice un hábito. Pasar la escoba todos los días, tender las camas, quitar el polvo de las superficies.
Siento que uno va evolucionando etapa a etapa. Ahora voy por la decoración de paredes, descubriendo mis gustos personales en ello.
Miro a mis mariposas (lo hago justo en este momento en que escribo), y se siente bien. Ver un lugar bonito, ordenado, personalizado para ti. Lo sientes tan tuyo, tan ese lugar secreto y tuyo, que no encuentro palabras para describirlo.
El ánimo te cambia. O, simplemente, te sientes positivo y feliz.
Y creo que también es porque cuando cuidas tu hogar, cuidas de ti. Así como me lavo el cabello, lo peino, y uso cremas para que esté saludable y huela muy rico, también me gusta cuidar de los espacios de mi casa.
El entorno influye en ti, de la misma forma que dice mucho de ti.
Si eres ordenado o no, si estás bien o no.
Me siento bien conmigo misma, me siento en paz, en calma, me siento satisfecha con mi vida. Y siento que los espacios de mi hogar lo van representando.
Me falta mucho por arreglar, porque a medida que voy trabajando en ganar más dinero voy mejorando cada lugar.
Quiero que pueda verme reflejada en ello. Aunque, siento
que tiene diversos matices, porque vivo con mi familia y todos agregan su toque personal.
Lo mejor es cómo todos también nos ocupamos en ello.
Lo que me hace pensar que cuando compre una casa y tenga a mis hijos y esposo, quiero enseñarle a mis niños eso. Cuidar de su hogar, cuidar de sí mismos. Que sean personas que presten atención hasta a las pequeñas cosas de la vida, porque creo que eso les da una forma de ver la vida distinta. La cual sin duda los ayudará mucho en la adultez.
I fix things little by little, now I go through the wall process.
On my desk I did something new, something I never thought I would do: place butterflies on the wall.
I would not have done so before, because it would be something that would not last long on the wall.
I made these butterflies for my sister's birthday cake, but, as you know, some details, then remain without any use. So I kept them on my desk to decide what to do with them.
Until a few days ago.
I cleaned, and I saw them again, and I said "What if I hit the wall with silicon?" I placed the books on the other side, and prepared to hit them. I also placed my improvised flower with all the flowers that Mom has given me. How nice it looks now!
I also painted part of the kitchen yesterday, and Mom placed a figure that looks beautiful on the wall.
Details like this give you that heat of home, in addition to inspiring you. In the same way we clean the entire house.
It is curious. Because usually, cleaning makes me think good decisions, or to drain when I feel very upset. Keep my mind calm, as well as I leave my house impeccable.
I would say it is a two by one. Although you would not believe me if I tell you that before it had to clean, until I started taking pleasure cleaning daily.
From there I made it a habit. Pass the broom every day, lay the beds, remove the dust from the surfaces.
I feel that one evolves stage by stage. Now I go for wall decoration, discovering my personal tastes in it.
I look at my butterflies (I do it right at this time I write), and feel good. See a beautiful, tidy, personalized place for you. You feel so yours, so that secret place and yours, that I can't find words to describe it.
The mood changes you. Or, simply, you feel positive and happy.
And I think it is also because when you take care of your home, you take care of you. Just as I wash my hair, the comb, and use creams so that it is healthy and smell very rich, I also like to take care of the spaces of my house.
The environment influences you, in the same way that says a lot about you.
If you are ordered or not, whether you are well or not.
I feel good with myself, I feel in peace, calm, I feel satisfied with my life. And I feel that the spaces of my home are representing it.
I have a long time to fix, because as I work to earn more money I am improving every place.
I want you to see me reflected in it. Although, I feel
He has various nuances, because I live with my family and everyone adds their personal touch.
The best thing is how we all also take care of it.
What makes me think that when I buy a house and have my children and husband, I want to show my children that. Take care of your home, take care of themselves. That they are people who pay attention to the little things of life, because I think that gives them a way of seeing the different lives. Which will undoubtedly help them a lot in adulthood.
21/12/24
Texto y fotografías de mi autoría. Fotos editadas en Meitu.
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