El enigmático talismán del oeste [ES/EN]

in Writing Club2 years ago (edited)

elenigmáticotalismándeloeste.png
Dan Meyers | Unsplash



banner-español.png

El enigmático talismán del oeste

Un hombre llegó al bar y golpeó la barra donde se sirven las bebidas con total brutalidad. El clima se puso tenso y todos se voltearon a ver qué sucedía. El cantinero sin entender nada se dispuso a servirle un trago al extraño mientras su botella temblaba por sobre el vaso.

—¡Quiero que me digas cómo debo usar este talismán, maldito viejo inútil! —Exclamó furioso el malviviente.

—Discúlpeme señor, es que no lo puedo ayudar, yo no sé como funciona. ¡Tenga piedad de mí! —Rogaba el hombre que dejó caer el vaso que sostenía con tantos nervios.

El malviviente le ordenó que limpiara el desastre que había hecho, y en un momento le dijo que ponga las manos sobre el alcohol tirado sin siquiera retirarlas. Luego un alarido de dolor sacudió el lugar.

El hombre le había machacado los dedos de las dos manos con la culata de su revólver con tal rudeza que los que estaban allí pudieron escuchar la rotura de todos sus huesos.

Varios se pararon y sacaron sus revólveres. Sin embargo, el Sheriff del pueblo no hizo más que una señal con la mano para pedir que no interfieran, pues de hacerlo podrían terminar todos muertos. El maleante era conocido por ser uno de los más rápidos del oeste, como también uno de los más inhumanos, pues parecía disfrutar del dolor ajeno.

Todos allí se volvieron a sentar mientras veían al hombre marcharse con el talismán, esta vez derramando sangre sobre sus pasos. Las prostitutas del lugar fueron a intentar ayudar al cantinero, quien ya no soportaba el dolor y se estaba a punto de desmayar a efectos de ese cruel animal.

Ese talismán tenía un poder latente, y cualquiera que encontrara como hacerlo funcionar podría tener el mundo a sus pies. No había nadie en el lugar que supiera, excepto un joven llamado Dallas Pitcock, el cual estaba escuchando discretamente la discusión en el bar.

Éste joven tenía un conocimiento muy amplio sobre los mecanismos que tenía el talismán en su interior, pues él provenía de una familia de artesanos especializados en reparar distintos tipos de relojes, y éste no se diferenciaba mucho. Aunque faltaba una cosa.

No existía nadie que pudiese saber qué poder real podría emerger dentro de ese talismán. Había una piedra en su interior que solo con la ayuda de un brujo era posible expulsar su poder hacia el exterior, aunque sin saber qué consecuencias tendría el liberar tanta energía.

El agresor había partido hacia el próximo pueblo, a unos cuarenta minutos cabalgando en caballo. Tenía la intención de encontrar respuestas sobre su uso para así poder vendérselo al mejor postor. Lo más grave de todo, quizás, es que no le importaba dañar ancianos, mujeres o niños si sabía que iba a obtener una buena paga por ello.

Dallas sabía que se tenía que anticipar a los hechos, y tenía un compañero en el pueblo al que lo llamaba amistosamente Comanche Rojo, que lo acompañaría en un viaje frenético a través de una gran parte del desierto. En ese extenso lugar la aridez estaba reflejada por una escasa vegetación.

Pastos quemados por un sol abrumador, un suelo resquebrajado en el que no pasaría ni una gota de agua por sus hendiduras, y un calor insoportable, hacían un condimento idóneo para que algo saliera muy mal.

Aunque no todo era tan malo como parecía, allí estaban asentados una familia de indios que protegían las llanuras de las maldiciones de una tribu enemiga, pero que últimamente se enfocaron en proteger sus natales tierras de la invasión de los blancos que, en muchas oportunidades, violentaban y violaban a sus mujeres.

El sol se escondía por sobre el horizonte y traía consigo una noche de nubes. Nubes que a su vez desprendían de ellas las gotas de una lluvia torrencial. La tribu allí suponía que los espíritus se comenzaban a manifestar en contra de una amenaza.

El sujeto del bar intentó frenar de golpe a su caballo, pero terminó cayendo de cara sobre el árido pero ahora húmedo suelo. Miró hacia su alrededor y notó que estaba en el territorio de los indios. Una situación extremadamente mala para él.

Se le acercó un jefe de la tribu con un rostro poco amigable. Se inclinó y tomó el talismán con fuerza del pecho del maleante. Y tras recitar algunas palabras en su lengua nativa, logró germinar del suelo los temibles espectros de su tribu ancestral.

Permaneció inmóvil mientras su vitalidad era consumida por los espectros. Luego de unos cuantos minutos de haber sido atacado por estos entes, su cuerpo yacía inerte sobre el suelo, aunque aún parado sobre sus rodillas en posición de pedir clemencia. Esbozaba un rostro de horror; muy posiblemente hubiese vivido sus últimas instancias en el infierno.

El talismán estaba a su lado, el cual fue tomado por el jefe, quizás pensando en que sería bien aceptado respecto a sus antepasados.

Cuando finalmente Comanche Rojo y Dallas habían llegado al lugar, la furia de los cielos se había descargado sobre el lugar. El jefe aprovechó el momento para invocar la totalidad del poder del talismán para recuperar las tierras que habían sido saqueadas por los blancos.

Eso incluía provocar el mayor caos posible en los pueblos aledaños. Cuando decidieron regresar al pueblo notaron que el Sheriff estaba allí. Atinaron a tirarse de los caballos al notar que la autoridad perpetró unos disparos con la sola intención de matar al jefe de la tribu, quien tenía en su poder el talismán.

El talismán cayó al suelo rompiéndose en pedazos, y quedó titilando en un color verde esmeralda hasta el punto de apagarse del todo su luz. Todo indicaba que la energía había sido liberada por completo y no existía quien pudiera revertir la situación, pues el jefe había muerto.

Esa noche, los indios que habían fallecido a manos de los blancos recobraron vida, y comenzaron a deambular el lugar llevando a sus cielos los gritos de guerra contra toda población viviente. La guerra del oeste contra el mundo espectral estaba por comenzar.

Los dos compañeros habían regresado aterrorizados al pueblo del que partieron. El Sheriff tardó en entender que había desatado un infierno en vida, y cuando lo hizo, no tardó en dispararse una bala sobre la sien para evitar seguir el lamentable destino que les esperaría a los demás.

En esta angustiosa y terrible situación, ambos se miraron y sintieron que debían permanecer juntos, esperando quizás, una respuesta divina que acompañe el principio de un final.

...

Comanche Rojo y Dallas tardaron un momento en darse cuenta de que juntos podrían contrarrestar este grave suceso, pues la suma de sus conocimientos podría ayudar a revertir la situación, y así, salvarlos a todos antes de que la perdición se apoderase de sus almas.




banner-english.png

The enigmatic talisman of the west

A man came to the bar and hit the bar where drinks are served with total brutality. The atmosphere became tense and everyone turned to see what was happening. The bartender, not understanding a thing, began to pour a drink for the stranger while his bottle was shaking on top of the glass.

—I want you to tell me how to use this talisman, you old good-for-nothing! —exclaimed the man in a rage.

—Excuse me, sir, I can't help you, I don't know how it works. Have mercy on me! —The man, who dropped the glass he was holding with so much nervousness, was roaring.

The man ordered him to clean up the mess he had made, and at one point he told him to put his hands on the alcohol without even taking them off. Then a shriek of pain shook the place.

The man had smashed the fingers of both his hands with the butt of his revolver with such rudeness that those who were there could hear the breaking of all his bones.

Several stood up and drew their revolvers. However, the Sheriff of the town made no more than a hand signal to ask them not to interfere, for if they did they might all end up dead. The crook was known to be one of the fastest in the west, as well as one of the most inhuman, for he seemed to enjoy the pain of others.

Everyone there sat down again as they watched the man leave with the talisman, this time spilling blood on his steps. The local prostitutes went to try to help the bartender, who could no longer stand the pain and was about to faint from the effects of that cruel animal.

That talisman had a latent power, and anyone who could find a way to make it work could have the world at his feet. There was no one in the place who knew, except a young man named Dallas Pitcock, who was discreetly listening to the discussion in the bar.

This young man had a very extensive knowledge about the mechanisms that the talisman had inside, as he came from a family of craftsmen specialized in repairing different types of clocks, and this one was not much different. One thing was missing, though.

There was no one who could know what real power could emerge inside that talisman. There was a stone inside that only with the help of a sorcerer it was possible to expel its power to the outside, although without knowing what the consequences of releasing so much energy would be.

The assailant had left for the next town, about forty minutes away on horseback. He intended to find answers about its use so he could sell it to the highest bidder. Perhaps most serious of all, he didn't mind harming old people, women or children if he knew he was going to get a good payday for it.

Dallas knew he had to anticipate the facts, and he had a companion in town whom he amicably called Red Comanche, who would accompany him on a frantic journey across a large part of the desert. In that vast place the aridity was reflected by sparse vegetation.

Grasses scorched by an overwhelming sun, a cracked ground where not a drop of water would pass through its crevices, and an unbearable heat, made an ideal seasoning for something to go very wrong.

Although not everything was as bad as it seemed, there were settled a family of Indians who protected the plains from the curses of an enemy tribe, but lately they were focused on protecting their native lands from the invasion of whites who, on many occasions, raped and violated their women.

The sun was hiding over the horizon and brought with it a night of clouds. Clouds that in turn gave off the drops of a torrential rain. The tribe there assumed that the spirits were beginning to manifest against a threat.

The guy at the bar tried to slam the brakes on his horse, but ended up falling face first onto the barren but now wet ground. He looked around and noticed that he was in Indian territory. An extremely bad situation for him.

He was approached by a tribal chief with an unfriendly face. He bent down and took the talisman forcefully from the chest of the crook. And after reciting a few words in his native tongue, he managed to germinate from the ground the fearsome specters of his ancestral tribe.

He remained motionless while his vitality was consumed by the wraiths. After a few minutes of being attacked by these entities, his body lay inert on the ground, although still standing on his knees in a position to beg for mercy. He wore a face of horror; quite possibly he had lived his last moments in hell.

The talisman was at his side, which was taken by the chief, perhaps thinking that it would be well accepted with respect to his ancestors.

When Red Comanche and Dallas had finally arrived on the scene, the fury of the heavens had been unloaded upon the place. The chief seized the moment to invoke the full power of the talisman to reclaim the lands that had been plundered by the whites.

This included causing as much chaos as possible in the surrounding villages. When they decided to return to the village they noticed that the Sheriff was there. They dared to jump off their horses when they noticed that the authority perpetrated a few shots with the sole intention of killing the chief of the tribe, who had the talisman in his possession.

The talisman fell to the ground, shattering into pieces, and remained flickering in an emerald green color until its light was completely extinguished. Everything indicated that the energy had been completely released and there was no one who could reverse the situation, for the chief was dead.

That night, the Indians who had perished at the hands of the whites came back to life, and began to roam the place carrying to their skies the cries of war against every living population. The war of the West against the spectral world was about to begin.

The two companions had returned in terror to the town from which they started. The Sheriff was slow to understand that he had unleashed a living hell, and when he did, it did not take him long to fire a bullet over his temple to avoid following the pitiful fate that would await the others.

In this distressing and terrible situation, they both looked at each other and felt they had to stay together, waiting, perhaps, for a divine answer to accompany the beginning of an end.

...

It took a moment for Red Comanche and Dallas to realize that together they could counteract this grave event, for the sum of their knowledge could help reverse the situation, and thus save them all before doom took hold of their souls.


Banner Mercado Shops Grande San Valentín Joyería y Ropa .png

La mente no solo oculta poder, también un mundo desconocido que explorar...
La acción de imaginar es vivir más allá de nuestros límites
💜

Sort:  

@vikvitnik , me encantó tu historia.. Dios Brndiga tus manos... mientras mis ojos leían tus líneas la mente me llevó a es maravilloso lugar del oeste...Gracias por compartir....

Muchas gracias por tu lectura. Me alegro mucho que te haya gustado, pues espero seguir manteniendo este ritmo para darle lo mejor a mis lectores. Un gran saludo.


The rewards earned on this comment will go directly to the people( @vikvitnik ) sharing the post on Twitter as long as they are registered with @poshtoken. Sign up at https://hiveposh.com.

Congratulations @vikvitnik! You have completed the following achievement on the Hive blockchain And have been rewarded with New badge(s)

You received more than 35000 upvotes.
Your next target is to reach 40000 upvotes.

You can view your badges on your board and compare yourself to others in the Ranking
If you no longer want to receive notifications, reply to this comment with the word STOP

Check out our last posts:

Our Hive Power Delegations to the December PUM Winners
Feedback from the January Hive Power Up Day
Hive Power Up Month Challenge 2022-12 - Winners List
The Hive Gamification Proposal Renewal

Congratulations @vikvitnik! You received a personal badge!

Happy Hive Birthday! You are on the Hive blockchain for 4 years!

You can view your badges on your board and compare yourself to others in the Ranking

Check out our last posts:

Our Hive Power Delegations to the December PUM Winners
Feedback from the January Hive Power Up Day
The Hive Gamification Proposal Renewal

Hola Vicky Feliz año nuevo, imagino que esta es la historia a la que te referías en Twitter, pobre villano maltratado je je je. Gran trabajo. Gracias por publicar en Writing Club.