Éste es un tema de nunca acabar. Publicaciones sin sal valoradas como si fueran hechas por un chef internacional y publicaciones con un sazón y una presentación magistral, valoradas como si fueran un tequeño vendido en una parada de autobuses.
Sólo hay que seguir publicando, dando tu mejor esfuerzo y cerrar los ojos ante las injusticias que vemos acá (justo vengo de ver una hace unos minutos).
Un abrazo. Gracias por tu desahogo.
Gracias a ti por pasar, leer y hacerme sentir que no soy la única que piensa de este modo, en algún momento pensé que la equivocada era yo.