Nos queda casi el sabor a salitre en nuestra alma después de leer tu relato, tan bien escrito y que trasunta esa melancolía del solitario, que en nuestros pescadores debe tener un sentido casi mítico (lo digo por Ulises). Un abrazo, @nancybriti.
Nos queda casi el sabor a salitre en nuestra alma después de leer tu relato, tan bien escrito y que trasunta esa melancolía del solitario, que en nuestros pescadores debe tener un sentido casi mítico (lo digo por Ulises). Un abrazo, @nancybriti.
La soledad que dejan las olas al irse. Siempre se van... abrazos