• Sistema tradicional
En la actualidad tenemos monedas como el dólar o el euro (monedas gubernamentales, de curso forzoso), medios de pago como PayPal, VISA, o MasterCard, y los registros contables que constan en los ordenadores de los bancos.
Son tres elementos, más o menos coordinados, con orígenes separados (bancos, corporaciones, y estados), que han ido confluyendo paulatinamente. Permiten ver de modo resumido la estructura del sistema monetario, bancario, y financiero que tenemos hoy día; tres realidades diferentes, interconectadas con más o menos dificultades: moneda, medios de pagos, y registro contable.
• Sistema alternativo
Desde el punto de vista financiero, bitcoin supone el nacimiento de una alternativa a ese sistema, ya que hasta su aparición, cualquier pago que no se realizara en efectivo (en persona) debía hacerse dentro de esa estructura. Bitcoin crea un nuevo sistema financiero, que integra —en origen— esas tres funcionalidades: moneda, red de pagos y registro contable, al margen de cualquier ente estatal o corporativo.
Además, este sistema financiero alternativo tiene unas particularidades desconocidas hasta la fecha: la moneda es infalsificable, los pagos son imposibles de censurar o impedir por un tercero, y el registro contable es inmutable, imposible de alterar.