El modo historia era lo mejor, algo que nunca se ha visto hasta la fecha. La sensación de ir ganando llaves para poder abrir zonas y competir con los jefes de cada una de ellas era increible. — Por esa razón siempre consideraré a Crash Team Racing mejor que Mario Kart.
P.D. La ciudadela también era mi mundo favorito, sobre todo porque me gustaba competir con el jefe final de esa zona; una especie de rata mafiosa que siempre cargaba una ametralladora antigua.