no obstante, siempre me he inclinado mas por una traducción mas latina que española como tal, hasta que probé Blasphemous
Me pasó algo similar cuando jugué a Space Marine 2. El único doblaje español que tiene ese juego es de España y, admito que pensé que se me haría raro. Pero luego de 30-40 minutos jugando, Dios, era un placer escucharlos hablar y recitar los juramentos, era como oír poesía, una maravilla. Creo que parte del encanto es que como no usaban modismos y eran frases más 'normales' que cualquiera podría entender, no arruinó mi experiencia.