Your business is as good as your attitude, your business is as bad as your attitude.
I had drawn two lessons from two different experiences I had yesterday. The first one took place in the morning when I went to a small grocery store in my neighborhood to get some stuff for myself.
I felt very sick when I woke up in the morning, but since I needed to eat something before I could take drugs, I managed to drag myself to the store. On getting there, the store was open but the sales representative was in the adjoining room.
I don't know what she was actually doing, but I guess she was busy with some stuff. I made her aware of my presence and told her I wanted to buy something.
At first, she impolitely told me to wait, assuring me she was going to show up in the next minute and attend to me. I obliged and waited, but five minutes had gone and she did not show up. I decided to be patient still, another five minutes went and she did not still show up.
It was at this point that I yelled out her name out of frustration and inquired about what she was doing. In response, she harshly said, "there are other shops around here, if you can't wait, go to the next shop and buy what you want, stop disturbing my ears". Without a second thought, I left and promised myself never to go to that shop again.
I left to the next shop and I was quickly attended to, and the sales representative who came to attend to me was a good observant. He noticed I was sick and asked me what the problem was and even advised I should try as much as possible to treat myself. I was made alive by how he had received me that morning.
The point here is, you should not have anything to do with business if you do not know how to use words wisely and appropriately. You cannot be insulting people when they make you their only options out of many choices by coming to patronize your business. You can't run a business when your communication skill is so poor.
If you are someone who gets angry easily or you cannot manage people when they get angry, don't consider business. Don't allow your negative feeling or anger affect the way you treat your clientele, you will end up compelling them to withdraw their patronage.
You have to smile while attending to your clienteles. You may feel this is too insignificant, but I can tell you it will be one of the reasons they will prefer you to others when you do it. Smiling with your customers while serving them can brighten their day and make them feel important too.
Ask them about their wellbeing. Asking your customers polite and simple questions like, ' how are you? Oh, you look sick, is everything ok? Or a remark such as, 'I have not seen you for awhile now', or, 'you look good in that dress' is not bad at all. It shows how important they are to your business.
The second experience I had was at the motor park where I went to board a vehicle. A lout wanted to take advantage of a young boy who was sachet water. He took about two sachets from the boy's container and refused to pay him, but the boy told him he was going to pay him and the began to drag. Soon, some kindhearted fellows approached and made the lout to pay the boy.
The boy would not have withstood the terrible guy if he was fainthearted and fearful.
That experience gave me a message yesterday, and the message is that, as an entrepreneur, you must be be able to adapt to your business environment if you want your business to succeed. Know the strategies that will work out for your business in the environment where it is located.
Thank you so much for visiting my blog. I appreciate your unwavering support.
ESPAÑOL
Tu negocio es tan bueno como tu actitud, tu negocio es tan malo como tu actitud
Saqué dos lecciones de dos experiencias diferentes que tuve ayer. El primero tuvo lugar por la mañana cuando fui a una pequeña tienda de mi barrio a comprar algunas cosas para mí.
Me sentí muy mal cuando me desperté por la mañana, pero como necesitaba comer algo antes de poder tomar drogas, logré arrastrarme hasta la tienda. Al llegar, la tienda estaba abierta pero el comercial estaba en la sala contigua.
No sé qué estaba haciendo en realidad, pero supongo que estaba ocupada con algunas cosas. Le hice saber mi presencia y le dije que quería comprar algo.
Al principio, de mala educación me dijo que esperara, asegurándome que aparecería al minuto siguiente y me atendería. Acepté y esperé, pero habían pasado cinco minutos y ella no apareció. Decidí tener paciencia aún, pasaron otros cinco minutos y ella todavía no aparecía.
Fue en ese momento que grité su nombre por frustración y le pregunté qué estaba haciendo. En respuesta, ella dijo con dureza, "hay otras tiendas por aquí, si no puedes esperar, ve a la siguiente tienda y compra lo que quieras, deja de molestarme los oídos". Sin pensarlo dos veces, me fui y me prometí no volver a ir a esa tienda nunca más.
Salí a la siguiente tienda y me atendieron rápidamente, y el comercial que vino a atenderme fue un buen observador. Se dio cuenta de que estaba enfermo y me preguntó cuál era el problema e incluso me recomendó que intentara tratarme lo más posible. Me dio vida la forma en que me había recibido esa mañana.
El punto aquí es, no deberías tener nada que ver con los negocios si no sabes cómo usar las palabras sabia y apropiadamente. No puedes insultar a las personas cuando te convierten en su única opción entre muchas opciones al venir a patrocinar su negocio. No puedes administrar un negocio cuando tu habilidad de comunicación es tan pobre.
Si eres alguien que se enoja fácilmente o no puedes manejar a las personas cuando se enojan, no consideres los negocios. No permitas que tus sentimientos negativos o tu enojo afecten la forma en que tratas a tu clientela, terminarás siendo convincente. que retiren su patrocinio.
Tienes que sonreír mientras atiendes a tus clientes. Quizás sientas que esto es demasiado insignificante, pero puedo decirte que será una de las razones por las que te preferirán a ti cuando lo hagas. Sonreír con tus clientes mientras los atiendes puede alegrarles el día y hacerlos sentir importantes también.
Pregúntales sobre su bienestar. Hazles a tus clientes preguntas sencillas y educadas como: "¿Cómo estás?" Oh, te ves enfermo, ¿está todo bien? O un comentario como "hace tiempo que no te veo" o "te ves bien con ese vestido" no está nada mal. Muestra lo importantes que son para su negocio.
La segunda experiencia que tuve fue en el parque de motor donde fui a abordar un vehículo. Un patán quiso aprovecharse de un joven que era bolsita de agua. Sacó unos dos sobres del contenedor del niño y se negó a pagarle, pero el niño le dijo que le iba a pagar y empezó a arrastrar. Pronto, unos tipos de buen corazón se acercaron e hicieron que el patán le pagara al niño.
El niño no habría resistido al tipo terrible si fuera pusilánime y temeroso.
Esa experiencia me dio un mensaje ayer, y el mensaje es que, como emprendedor, debes poder adaptarte a tu entorno empresarial si quieres que tu negocio tenga éxito. Conozca las estrategias que funcionarán para su negocio en el entorno donde se ubica.
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